"𝘗𝘰𝘳𝘲𝘶𝘦 𝘵𝘢𝘮𝘣𝘪𝘦́𝘯 𝘦𝘭 𝘦𝘯𝘦𝘮𝘪𝘨𝘰 𝘱𝘰𝘥𝘳𝘪́𝘢 𝘵𝘦𝘯𝘦𝘳 𝘶𝘯 𝘧𝘪𝘯𝘢𝘭 𝘧𝘦𝘭𝘪́𝘻"
La complacencia en su sonrisa las veces que cometía sus más crueles actos hacia mí, eran los que sin ironía me hacían delirar. Sorprendentemente...
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𝚍𝚒𝚌𝚒𝚎𝚖𝚋𝚛𝚎 𝟸𝟹, 𝟸𝟶𝟸𝟸
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Pensando en todo lo que he vivido desde ese día, pintaba en el lienzo con el pincel lleno de acrílico de pintura marrón con blanco. Estaba haciendo una obra en algún lugar donde había un hermoso puente, la luna y su luz que reflejaba en el agua hacía visible la silueta de dos jóvenes enamorados dándose un beso se pudiera diferenciar.
Sonreía con cada movimiento de mi mano que pintaba a detalle cualquier cosa a la que le quisiera dar color. Llevaba tres días trabajando en el regalo que le daría a Gwi-Nam, era un obsequio navideño. Recuerdo que cada navidad mis padres venían desde Seúl para celebrar conmigo, así que el día 24 de diciembre ellos y yo teníamos preparados los regalos.
Y aunque ellos ahora no están conmigo para acompañarme, Gwi-Nam y los chicos lo están; a excepción de Joon Jeong que se separó de nuestro grupo hace ya un mes.
—¡Hola! —On-jo me abrazó por atrás— ¡Oh, qué bonito está! ¿Se lo vas a dar a Gwi-Nam?
Asentí. —Es la primera vez que le regalo una pintura hecha por mí a alguien que no sean mis padres. —suspiré— Estoy impresionada.
On-jo agarro un pequeño banco que estaba en un espacio para pintar vacío y después se sentó a mi lado con la boca abierta de ver la bonita obra de arte que estaba frente suyo.
—Es muy bonita, estoy segura de que le va a gustar.
—¿Por qué todos han cambiado con Gwi-Nam? Es muy raro, de la nada todos se llevan bien. —reí en las palabras.
—Tal vez sea porque Cheong-san y yo nos hemos acercado mucho a él.
—¿Y eso por qué?
Empezó a reír. —Porque Gwi-Nam a veces no sabe qué regalarte, así que también hay ocasiones en las que habla con Cheong-san para darse una idea.
—Siempre supe que él no era el de las ideas tan bonitas. —sonreí y la miré— Qué bueno que tengas a Cheong-san como novio, es muy creativo.
—Ay. —se sonrojó— Nosotros no somos los únicos que lo ayudamos.
—¿No? —le miré de inmediato con sorpresa.
Negó. —Tiene una mejor amiga, bueno, él dice que es su mejor amiga.
