IV

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Albus siente que algo no va bien con su amigo Scorpius, y como nunca ha sido bueno socializando decide comentarlo con Gio una tarde que queda con ella para pasear por el pueblo.

-¿Dices que está así desde el día de la fiesta?- pregunta la niña

-Si

Scorpius no le habla, y si lo hace es solo para cosas que son estrictamente necesarias. Ya no hacen excursiones por el lago, ni mantienen sus charlas nocturnas, ni siguen haciendo maratón de películas en la cama de Albus.

-¿Crees que pueda estar enfadado?-

-Se que esta enfadado

Albus y Giorgia son amigos desde el día de la fiesta. Parece ser que durante aquella noche Albus no solo le dio un torpe beso a la niña, sino que le dio también su número de teléfono, algo que no habría hecho nunca si no hubiera estado bajo los efectos del alcohol. Giorgia llamó al día siguiente para pedirle una cita y tras haberlo consultado con Scorpius, Albus aceptó. Pronto ambos chicos descubrieron que tenían más bien pocas cosas en común y tener una relación de amor quedó rápidamente descartado. Pero a pesar de sus notables diferencias, sí se hicieron amigos.

-¿Y si está celoso?- menciona a Giorgia después de  un rato

-¿Celoso de qué?- responde confundido Albus

La chica de pelo negro y ojos azules niega lentamente mientas sonríe

-La pregunta no es ¿de qué? sino ¿de quién? -explica con calma-Y estoy segura que esta celoso de mi

Albus no sabe que contestar y la chica tampoco profundiza más en el tema. Hablan durante un par de minutos más y finalmente la Giorgina se despide de Albus con un beso en la mejilla.

-Si de verdad quieres saber que le pasa a tu amigo-dice mientras se monta en su bicicleta -Habla con Alessio Zabini-

-¿Por qué Zabini?

-Porque el lo sabe todo

La vuelta a casa es aburrida para Albus, que está acostumbrado a hablar con Scorpius durante los trayectos en bicicleta. Solo escucha sus pensamientos y los pajarillos que cantan desde los árboles. A Scorpius le encanta jugar a adivinar que pájaro es solo escuchando su sonido. El moreno pronto se encuentra relacionando todo con su rubio amigo y se da cuenta de lo mucho que le echa de menos.

Cuando llega a casa la bicicleta de Alessio está aparcada en la entrada y Albus sabe que es el momento idóneo para hablar con él de su amigo. Albus busca al italiano por toda la casa y finalmente lo encuentra tomando el té junto a Astoria y su propia madre. ES un sin vergüenza, piensa Albus. Carraspea un par de veces para llamar la atención del chico y lo único que consigue es que las dos mujeres volteen a mirarlo.

-¡oh, que bien que hayas llegado ya!- Exclama la señora Malfoy

-Cariño siéntate y merienda con nosotros- le dice su madre

Albus sonríe con angustia

-En realidad, me gustaría hablar un momento con Alessio

El moreno parece estar disfrutando el momento, da dos sorbos más a su café, se limpia con pequeños toques la boca y antes de levantarse de la mesa se despide de ambas mujeres.

Una vez alejados, Zabini pregunta

-¿Qué te trae por aquí Potter?

-Vivo aquí

Albus no quiere ser borde, pero su problema con Scorpius solo hace empeorar su delicado humor.

-Y razón tienes. Quieres hablar de Scorpius, ¿cierto?- Pregunta, porque al jodido Zabini no se le escapa ni una.

Una Estrella FugazDonde viven las historias. Descúbrelo ahora