the neighbors [noren-markren]

nueve

Renjun había tomado el buen consejo de sus amigos y lo estaba siguiendo con religión.

Si, salía con ambos de formas muy diferentes y por supuesto nunca haciendo lo mismo. Mientras con Mark hacía bocetos de robots irreales que nunca construirían, con Jeno iba a disparar en algún campo libre, con Mark hablaba del futuro, de sus sueños y series favoritas y con Jeno conversaba acerca de extraterrestres y si ellos pagarían impuestos en sus planetas.

"-Siempre hay alguien que se quiere aprovechar...

-¿Pero quien es el presidente?

-Eso nunca lo sabremos."

Mark era sensato y era como si siempre dijera todo lo que quería escuchar, era como si sus padres hubieran criado a un pequeño príncipe para que fuera encantador.

Jeno en cambio lo hacía reír y unas de sus cosas favoritas de él es que era tan jodidamente atento, dándose cuenta de cuando tenía frío antes de que siquiera temblara, o cuando le compraba una bebida segundos después de que siquiera pensara que tenía sed. Adoraba discutir con el, no temía en tener su propia opinión y dar sus argumentos explicando porque las cosas debían o eran de esa forma. Siempre quería arriesgarse a hacer algo nuevo, a enseñarle algo que nunca pensaría en probar y mostrarle que había mucho más allá de los libros y el taller de robótica. Además el rubio también se dejaba enseñar y se impresionaba por todas las cosas que le mostraba.

-¿Qué hacemos aquí?-soltó divertido. Renjun nunca pensó estar en el Instituto a las diez de la noche pero parecía que ser deportista estrella te daba beneficios por encima de los demás.

-Paseando.

-¿En el instituto?

-Si...-tomo su mano mientras caminaban por el campo.

-Esto es gigante.-dijo mirando a su alrededor.

-¿Nunca habías venido?

-Nop. En serio no entiendo nada de deportes, fútbol, béisbol... Jugué ajedrez, ¿Te lo dije?

-Si, y busque videos y no es para nada un deporte, ¿Qué sudas? ¿Los dedos?

-¡Hay que pensar! ¡Ejercitas el cerebro!

Jeno se giró a mirarlo divertido.

-Esta bien, lo acepto. Pero dejando de lado tu hermoso deporte...-Renjun rodó los ojos.-Vamos a practicar fútbol.

-Me estás jodiendo, ¿Cierto?

-Nop.

Jeno de repente fue por un balón y se lo tiro, Renjun apenas lo tomó.

-Yo no estoy seguro de que sepa que hacer con esto.

-Huye.

-¿Qué?

-Huye con la pelota o tal vez termines tacleado.

-Jeno...-comenzó a alejarse cuando vio al rubio comenzar a caminar hacia el.-¡Lee Jeno!

-¡Corre!

Y corrió, corrió como si su vida dependiera de eso y estuvo seguro de que varias veces Jeno pudo atraparlo pero no lo hizo, quizás por pena o cualquier otra cosa. Huyó cada vez que el rubio intentó tomarlo hasta que ya no pudo respirar más y fue disminuyendo su velocidad haciendo que Jeno literalmente lo tacleara.

-Joder...

Jeno comenzó a reír, aún encima suyo.

-Lo siento, no calcule tu tamaño.

-¿En serio juegas esto por pasión?-se quejó buscando una mejor posición debajo del rubio.

-Si, con casco y protección, pero si.