Marcas © [BORRADOR]

I n t r o d u c c i ó n

El sabor de sus labios está aún en los míos. Aun siento su dulce tacto en las noches frías. Su voz se escucha como la primera vez desde que comenzamos a jugar. Y las marcas de sus más dulces caricias están tatuadas en mi piel. Junto con las más agrias.

Con tan solo 18 años mi vida se convirtió en un caos que me llevó a sobrellevarlo con la completa inexistencia de mis emociones pero siento que ese caos, por alguna razón, desató la necesidad de saciar lo que sentía desde hace tanto, solo se propagó en mí, de nuevo, siento que la vida me puso en frente lo que quería, pero no debía tener.

Desde que inició lo que inició me sentí algo extraña. Sabía que estaba mal, muy mal, no era correcto, no tenía que hacerlo, no debía suceder, ¿pero quién vive sin hacer las cosas que uno quiere? Eso no es vivir.

«Tengo que dejar de pensar en eso.»

Gracias a las cosas que pasaron y que; ocasioné, me hice más fuerte, pero también débil. No lo negaré, como cualquier humano en este jodido mundo cometo errores, y mierda..., sí que he cometido muchos. Solo sé que todo se convirtió en un juego, uno que terminó mal, realmente mal.

¿Mi nombre? Me llamo Madeline Casttello, hija de Dante Casttello y Laura Monnet.

¿De quién hable desde un principio? Te lo diré a su tiempo.

Lo que sí puedo decirte es que nunca debes jugar con fuego porque si temes quemarte, ¿para qué juegas con él entonces? Te diré que he perdido mucho, que he ido de arriba hasta lo profundo y he quedado en el medio. Pero no quedara así por mucho tiempo.

Que también puedes chasquear los dedos y acabarlo todo. Pero también tienes que saber que chasqueando los dedos pueden acabar contigo. Que convertí la vida de muchos en un infierno que jodidamente yo desaté, que yo me busqué. Aunque para ser sincera, todo ya era un infierno, ¿pero como verlo si tienes los ojos vendados?

¿Qué mierda pasó para qué te este contando esto?

Ya leerás.

Esta es la historia de las Marcas que se quedaron en mí. Esta es la historia que marcó mí vida y la de muchos más. Solo sumérgete entre líneas y líneas. Páginas y páginas. Capítulos y capítulos, que explican todo, desde donde comenzó todo.

Te enloquecerás. Te derrumbarás. Te preguntarás: ¡¿Por qué?! Perderás la razón o..., tal vez no. Solo tú lo sabrás. Si te atreves claro.

¿Estás de acuerdo?

¿Sí?

Ven entonces.