•Takemichi tiene un crush muy grande por Manjiro Sano, así que decide declararse escribiendo una carta.
Chifuyu no sabe que siente por Baji tiene miedo de confundir la amistad con el amor.
¿Qué pasará cuando la declaración de Takemichi termine por...
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Primer Arco: 𝕮𝖔𝖓𝖋𝖚𝖘𝖎𝖔𝖓𝖊𝖘
Takemichi tenía un crush en Manjiro Sano
Si le preguntan cuándo comenzó todo no sabría que responder, puede ser cuando cruzaban miradas curiosas en los miles de pasillos de su instituto o quizás fue cuando se encontraron en el laboratorio de química.
Era una tarde de martes, Hanagaki frustrado se dirige al laboratorio para terminar su informe el cual ha estado procrastinado por semanas, no le gustaba particularmente ir a ese lugar el ambiente blanco y pulcro lo ponía de los nervios, lo bueno es que a esa hora probablemente estaría solo. Cuando entró se dirigió a la mesa del fondo, solo porque no quería darle la espalda a ninguno de los armarios, no es que tuviera miedo, para nada.
Dos horas después su estómago comenzó a exigir alimento, así que abrió su topper para sacar los taiyakis que Akkun le dio, todo estaba bien hasta que en el armario frente suyo comenzaron a sonar pequeños golpes, su corazón se detuvo para luego palpitar a una velocidad precipitada hasta que vio una melena rubia arrastrarse desde dentro. Dicha persona se levantó del suelo y fue entonces donde Takemichi lo reconoció como Sano Manjiro.
-Oye ¿Qué demonios hacías en el armario?-
-Dormir- el chico se estiró mientras su espalda traqueaba- ¿me compartes de tu comida?-
Y así fue como se conocieron, esas simples palabras dieron comienzo a una amena charla que duró horas, el informe quedó de lado y para cuando se dieron cuenta Hinata Tachibana la monitora de la clase de química fue a pedirles que se retiraran para poder cerrar el laboratorio.
Luego de esa tarde no volvieron a hablar, pero comenzaron a cruzarse "casualmente" en los pasillos. Se dio cuenta que Manjiro era el capitán del equipo de karate además de que solía ser indiferente con la mayoría de las personas que se cruzaba, solo se le veía sonriendo con sus amigos o con sus hermanos haciendo que sus ojos negros brillen de una manera adictiva.
Esa curiosidad inicial se convirtió en admiración, de la cual pasó a ser amor, un amor que sabía que era imposible además de no correspondido. Hanagaki se hizo la loca idea de que Manjiro quizás tenía algo más que una amistad con el joven del tatuaje de dragón por lo cercanos que eran.
Hasta que llegó agosto y el desastre inició.
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