•Takemichi tiene un crush muy grande por Manjiro Sano, así que decide declararse escribiendo una carta.
Chifuyu no sabe que siente por Baji tiene miedo de confundir la amistad con el amor.
¿Qué pasará cuando la declaración de Takemichi termine por...
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Saliendo de su reunión del club de karate, se dirigieron a sus casilleros para buscar su ropa de cambio e ir a las duchas del gimnasio.- ¿Entonces hace cuánto te gusta Chifuyu? - preguntó de manera nada directa Manjiro, sabiendo que si no lo hacía así Baji seguiría haciéndose el loco y evitando el tema.
- ¡NO! digo no no no, me gusta otra persona jajaja- afirmó Baji tratando de que no viera su sonrojo - Además ¿quién es Chifuyu? no sé de ningún Chifuyu-
-No te lo crees ni tú- Se burló Draken llegando acercándose a ellos- es obvio que estas enamorado de ese chico rubio otaku, solo eres demasiado cobarde para asumir sus sentimientos-
-Oye Draken ¿cómo vas con Emma?¿Ya lograste confesarte? - se burló Kazutora, mientras abría su casillero- Es tan irónico que llames a Baji cobarde cuando tu llevas años intentando declararte a Emma-
-No te reflejes en las personas Draken- regaño Mitsuya- Aunque tienes razón, ambos son unos cobardes, es aún más patético cuando todos nos damos cuenta de que Emma siente lo mismo que tu-
-No quiero apresurar las cosas, mucho menos que mi declaración a Emma termine siendo por presión social, ella se merece algo mejor, si un día le digo mis sentimientos será bajo mis términos y no porque un grupo de personas me digan que es el momento indicado- se justificó Draken a la vez que fruncía el ceño dándose cuenta de que otra vez alguien había robado su acondicionador, en serio, él no tiene tanto cabello y seguían tomándolo como si fuera oro líquido.
Baji rindiéndose en su pobre intento de convencer a todos de que no le gustaba su vecino, murmurando maldiciones, se dio vuelta dándole cara a su casillero. No entendía por qué se sentía tan asustado de admitir que amaba a su vecino.
Cuando abrió su casillero una pequeña carta en un sobre color azul pastel cayó suavemente a sus pies, un sentimiento confuso se instaló en su mente ¿qué demonios era esa carta? dudaba que fuera una confesión, después de todo a nadie le gustaría alguien como él. Al quedarse estático por un momento despertó la curiosidad de sus amigos quienes lo miraron atentamente, de manera lenta tomó el sobre del suelo mirándolo con duda.
- ¿Una carta? - preguntó Manjiro mientras agarraba todo su cabello en una coleta
- Al parecer alguien tiene el suficiente mal gusto para enamorarse de Baji, pobre alma en pena- dramatizo Kazutora mientras se quitaba los zapatos
- Kazutora no seas una mierda- regaño Mitsuya aguantando las ganas de reírse - como sea, Baji ¿vas a leerla? -
-Supongo, es decir es lo mínimo que puedo hacer ¿de quién será? - dándole vuelta a la carta para buscar algún rastro del remitente- ¿Hanagaki Takemichi? me suena su nombre, pero no tengo de idea de donde-
-Oh creo que es el amigo rubio de Chifuyu, tu sabes: el que tiene unos bonitos ojos azules- señaló Pah-Chin mientras se dirigía a las duchas-
