💫 Capitulo V 💫

53 6 0
                                    

— No pasarás por ahí. — Insistía Cameron. —

— No me harán nada, sólo pasaré rápido y los ignoraré. — Me encogí de hombros restándole importancia, él me veía serio, parecía no estar convencido. —

¿Y si esperas a que se vayan? — Preguntó mirando hacia donde ellos estaban. —

— Ten un poco de confianza en mí. — Me señalé con el dedo índice, él bufó. —

— No lo sé, ellos no me dan confianza.

— Los golpearé si intentan hacerme algo. — Sonreí, aunque no estaba cien por ciento segura si podría con ellos. —

— De acuerdo, pero me quedaré vigilando. — Mantenía su postura seria mirando aún hacia donde se encontraban aquellos chicos. —

— Tranquilo, ya verás que no será necesario aplicar la fuerza bruta. — Le di una palmada en el brazo y comencé a caminar a casa de Ericka. —

Siendo sincera mis piernas temblaban un poco ante la idea de que aquellos chicos me hicieran algo, lo que me tranquilizó un poco fue que no había señales de botellas de alcohol ni nada por el estilo.

Estaba a punto de llegar frente a ellos cuando el castaño con rayitos volteó y cuando me miró una enorme sonrisa se formó en su rostro.

— Mira a quien tenemos aquí, Lucas. — El otro chico levantó la mirada para observarme y sonrió de igual manera. —

Nota mental: El chico de lindo trasero se llama Lucas.

— ¿Qué haces nuevamente aquí? Y sola, otra vez. — Ambos se levantaron y comenzaron a acercarse a mi, no respondí y quise continuar con mi camino pero el rubio me tomó del brazo. —

— No te vayas, queremos jugar contigo. — Tenía a ambos peligrosamente cerca de mí, volteé para mirar en dirección a donde Cameron se encontraba, estaba a punto de correr a mi pero moví mi cabeza negando, quería salvarme de esta yo sola. —

— ¡Suéltame, idiota! — Le golpeé la entrepierna al castaño con rayitos quien me veía con el rostro rojo de furia, estaba a punto de golpearme cuando le tomaron el puño. —

— Déjala. — Me sorprendí al ver al chico de lindos ojos tranquilizando a su amigo. —

— ¿Por qué? ¿¡Acaso no viste que me golpeó!? — Gritó enfurecido el castaño con rayitos. —

— Dante, vete. Igual tú. — Señaló a Lucas —

Segunda nota mental: El castaño con rayitos se llama Dante.

Ambos lo miraban furiosos pero finalmente se fueron, no sin antes mirarme mal a mí. Volteé nuevamente en dirección a Cameron y éste seguía presenciando la escena escondido.

— Me pareció haberte dejado en claro que no te metieras en nuestros asuntos. — Habló serio. —

— No me metí en sus asuntos. Yo solo venía a trabajar. No es mi culpa que los idiotas de tus amigos siempre quieran hacerme daño. — Él me miraba sin expresión alguna. —

𝐴𝑚𝑜𝑟 𝑃𝑟𝑜ℎ𝑖𝑏𝑖𝑑𝑜 - 𝐴.𝐺. {𝑨𝒅𝒂𝒑𝒕𝒂𝒄𝒊𝒐́𝒏}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora