💫 Capitulo VI 💫

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Subí a mi habitación pensando en lo que me había dicho Roscio hace unos minutos. Después de todo los chicos sí eran peligrosos, ¡Mataron a una chica indefensa!

Me acosté en la cama mirando hacia el techo. No puedo dejar mi trabajo, Lizzy y yo lo necesitamos ya que ella no ha conseguido trabajo, aunque si no dejo el trabajo me expondría nuevamente a los chicos.

El crujido de una rama rompiéndose me sacó de mis pensamientos, me sobresalté ya que junto al balcón de mi habitación había un árbol.

Tal vez sea un gato trepando el árbol, pensé.

Ignore el sonido y me quedé acostada mirando hacia el balcón, unos minutos después me quedé profundamente dormida.

(...)

El sonido de algo cayéndose me despertó, talle mis ojos para poder ver un poco mejor y me di cuenta que la puerta que daba al balcón estaba abierta, estoy 100% segura que yo la había cerrado.

El aire entraba por la puerta lo que causó que el vaso que tenía en la mesa de noche se cayera, aún tenía un poco de agua así que esta se vertió en el piso. Baje a la cocina a buscar un trapo para limpiar el agua y una vez que lo encontré volví a subir.

Nuevamente me encontré con la puerta abierta, ¡Estoy segura que la había cerrado!

Comencé a caminar lentamente hasta quedar frente a la puerta, la curiosidad me invadió y salí al balcón pensando en que podía encontrar a alguien o algún animal que entró... Pero, si fuera un animal, ¿Cómo abriría la puerta?

Al no encontrar nada regresé a mi habitación y me volví a acostar en la cama para tratar de conciliar el sueño nuevamente.

(...)

— ¿No renunciarás? — Preguntó Roscio en la mañana, estaba esperando a que fueran las 8:00 de la mañana para despertar a Jasper ya que Ericka llegaba a las 9:30. —

— No, este trabajo es todo lo que tengo. — Ella me miraba atentamente. — Y no puedo quedarme aquí y dejar a mi amiga sola.

— Lo comprendo, pero debes tener cuidado T/n. — Asentí lentamente mientras ella se dirigía a la cocina para preparar el desayuno de Jasper. —

Subí delicadamente las escaleras para no hacer mucho ruido y despertar al pequeño pero un ruido proveniente de mi habitación me sobresaltó y comencé a caminar hacia ella. Cuando entré me encontré con un pequeño desastre, la lámpara de noche estaba en el suelo rota.

Espero que no me lo descuenten de mi sueldo.

Extrañamente no había razón alguna por la que la lámpara se cayera, la puerta del balcón estaba abierta pero no hacía aire ni nada por el estilo, además el aire no podría tirar esa lámpara.

Un momento... ¿La puerta del balcón estaba abierta? ¿Qué sucede aquí?

(...)

— ¿La puerta del balcón se abre sola? — Interrogó Lizzy confundida. —

— Eso creo, en la madrugada se abrió dos veces y después en la mañana cuando iba a despertar a Jasper. — Conté a mi amiga lo sucedido, verdaderamente se me hacía raro lo que había sucedido. —

— Tal vez fue un animal T/n, tranquila.

— Un animal no abre puertas, Lizzy. — Le dije con el ceño fruncido, no le he contado sobre lo que Roscio me dijo, sabía que ella querría que dejara el trabajo inmediatamente. —

— Como sea, no creo que sea algo malo. — Se encogió de hombros y continuó bebiendo de su licuado de fresa. — Oh, hoy iremos a comprar sofás. — Chilló feliz. —

— De acuerdo, por cierto, ¿Ya conseguiste trabajo? — Ella sonrió asintiendo lentamente. —

— Por supuesto que si. — Respondió con orgullo. —

¿En qué trabajas? — Le pregunté curiosa. —

— En una cafetería, sólo atiendo a los clientes y les llevo sus pedidos, no es un gran trabajo pero aún así nos sirve para comprar las cosas que necesitemos. — Se encogió de hombros pero sin borrar la sonrisa de su rostro. —

— Es perfecto, a este paso compraremos todo lo que necesitamos. — Sonreí para después tomar de mi licuado de chocolate. —

— Oh, Cameron y Noah nos acompañarán. — Dijo y se levantó rápidamente para caminar a la cocina. —

(...)

Estábamos en el centro de la ciudad, según Lizzy ella quería comprar primero nuestras camas ya que era lo que necesitábamos, aunque yo no duerma en casa.

— ¿Hoy irás a trabajar? — Preguntó Cameron llegando junto a mi. —

— Sí. — Respondí cortante sin dirigirle la mirada. —

— Te acompañaré otra vez. — Sonrió y yo volteé a verlo con una ceja encorvada. — Sé que no quieres, pero es por tu seguridad. — Se encogió de hombros. —

— Tú no puedes protegerme siempre, Cameron.

— Ya sé, T/n. — Miró al suelo mientras continuábamos caminando. —

— Nos acabamos de conocer, no comprendo ese interés por querer protegerme. — Y era cierto, desde que él se enteró que trabajaba cerca de esa zona extrañamente se empeñó en querer protegerme de esos chicos. —

— Son peligrosos, lo haría por cualquier otra chica, así que no te sientas especial. — Sonrió arrogante y yo rodé los ojos. —

— Tú no eres una clase de super héroe como para evitar que aquellos chicos hagan daño. — Él volteó a mirarme con el ceño fruncido pero tenía una sonrisa dibujada en el rostro a la vez. — Corres el mismo riesgo que cualquier otra persona.

— En eso tienes razón. — Sonrió. — Pero no pierdo nada con intentarlo.

— ¿Puedo hacerte una pregunta?

— Ya la estás haciendo. — Me detuve para mirarlo seriamente. — Ya, ¿Qué quieres saber? — Preguntó mirándome. —

— ¿De dónde los conoces? ¿Por qué sabes que son muy peligrosos? ¿Ellos te han hecho algo?

— Wow, dijiste una pregunta. — Soltó una carcajada. — Es una historia muy larga.

— Tengo tiempo. — Respondí y me senté en el pavimento mientras él me veía con una ceja arqueada. —

— No quiero hablar de eso T/n. — Y sin pronunciar una palabra más me dejó sentada ahí sola. —

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💫 Aquí les traigo el capítulo del día de hoy, espero les guste mucho el capítulo y le den mucho apoyo, disculpen si hay alguna falta de ortografía, comenten mucho por favor me encanta leer cada uno de sus comentarios, y nada cuídense mucho y sin más hasta el próximo capitulo💫

𝐴𝑚𝑜𝑟 𝑃𝑟𝑜ℎ𝑖𝑏𝑖𝑑𝑜 - 𝐴.𝐺. {𝑨𝒅𝒂𝒑𝒕𝒂𝒄𝒊𝒐́𝒏}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora