Sirius Black, aquel hombre con un mal expediente en el ministerio será prófugo de Azkaban con el fin de conocer a su ahijado. Lo que no sabía es que conocería al raro y dinámico trio al que Harry pertenece, a ellos y a Angel Malfoy.
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Enero dio paso a febrero sin que se notara, persistiendo en el mismo frío glaciar.
Angel caminaba con una caja en manos repartiendo botones a cuantas chicas viera. Por lo menos nadie le había dicho que no a ninguna.
—¡Malfoy! —gritó Harry, quien corrió hasta llegar a donde ella con la escoba en manos—. La profesora McGonagall me ha devuelto la Saeta de Fuego, gracias por permitirme usar tu escoba.
—No es nada —sonrió Angel—. Pero, ¿te importaría dármela más tarde? Aún tengo algunos botones por repartir.
Este la vió curioso.
—¿Puedo saber de que son? —preguntó echando un vistazo.
—Bueno, he creado unos botones, unos que buscan igualdad —respondió Angel—. Puedes tomar uno, si quieres.
Harry asintió y lo tomó en sus manos. El botón era en un tono morado, así mismo, la frase En busca de una igualdad estaba marcada con letras blancas para después transformarse en el símbolo sexual femenino.
—Igualdad, eso es lo que quiero —dijo Angel segura de sus palabras—. Quiero los mismos privilegios, las mismas oportunidades y que dejen de tratarnos como personas incapaces. Será difícil... con la familia que tengo, pero empezaré aquí, en Hogwarts. Hogwarts se ha vuelto mi hogar.
Harry regresó su mirada a ella.
—¿Quieres... quieres que te ayude a repartirlas? —preguntó con timidez. Angel asintió con una sonrisa.
Y así dieron marcha.
La idea era hacer concientizar a los demás. Dejar en claro el mensaje de que todos valen lo mismo, de que la mujer no busca ser igual al hombre, busca tener las mismas oportunidades de levantamiento.
Y no pararía hasta lograrlo.
——— ••• ———
¿Draco? Draco no podía negar tenerle cierta envidia a su hermana. La chica contaba con una gran escoba, misma que era alabada por las cuatro casas del colegio. Fue en cuestión de días cuando los estudiantes buscaban cualquier momento para hablar sobre la nueva escoba de Harry Potter, e incluso, algunos intentaron crear rivalidad entre Angel y Harry, pues eran los únicos estudiantes que contaban con una auténtica Saeta de Fuego.
