“Como levantar a tu baby de la cama: Por Victor A. Rivera”Las cortinas de la ventana fueron abiertas de par en par, dejando que la cálida luz del sol inundara la habitación.
Pero por más poético que sonara eso, al que menos le agradaba la idea era al chico recostado sobre la cama, aún cubierto con las colchas, mientras intentaba cubrirse de la luz con las almohadas.
—Sol de mierda— murmuró malhumorado.
Su único deseo era seguir durmiendo.
Lamentablemente, sus acciones no pasaron desapercibidas por su novio, quien se encontraba parado en el marco de la puerta, estaba ya cambiado y casi listo para comenzar su día.
—Buenos días, bebé— el hombre se acercó a quitar las almohadas que cubrían la cabeza del castaño, pero solo recibió un gruñido de desagrado —Vamos, es hora de levantarse.
—No quiero...— se quejó mientras recibía un beso en la cabeza.
—Es un nuevo día, arriba.
El chico por fin descubrió su cara y miró molesto al mayor.
—Suenas como mi tía cristiana.
—¿Gracias?
Victor dejó la cama y fue directamente al armario de la habitación, buscando alguna corbata que ponerse para ir a trabajar.
—¡Me duele todo! Ahhh...— lloriqueó.
—Yo opino que tienes las fuerzas suficientes como para levantarte a desayunar— sonrió.
—Pudrete.
El menor volvió a cubrirse con las sábanas mientras le sacaba el dedo del medio a su novio.
—Yo también te amo, bebé.
Al ver que el chico no planeaba salir de su escondite, el pelinegro volvió a acercarse a la cama y movió bruscamente el bulto de sábanas.
—¡Mhhhhn!
—Vamos, ya le levántate ¿O quieres que repita lo de anoche?
Nico volvió a descubrirse y se sentó en la cama, viendo al mayor con el ceño fruncido.
—Eso es cruel hasta para tí y lo sabes.
—Pero soy capaz.
—¿Capaz? Yo también soy capaz de tomar mis cosas e irme a dónde mis padres.
—Amor ¿Tanto escándalo por levantarse temprano? Eres más jóven que yo, deberías tener más energía.
—Acabas de llamarte viejo.
—Tienes suerte que hoy entras tarde, apúrate para desayunar algo.
—Mejor no como nada, así me desmayo y puedo faltar a clases.
—En serio deja de exagerar— palmeó el relieve de sábanas que formaban las piernas del menor —Además me tomé el tiempo de preparar panqueques y-
—¡Espera!— lo calló —¿Dijiste panqueques? ¿Preparados por tí?
—Sí, eso dije.
El mayor pudo sentir como era empujado y las colchas eran quitadas bruscamente de la cama. En cuanto miró, el chico ya no estaba en la cama, es más, no se encontraba en ninguna parte de la habitación.
En seguida se dirigió hasta la cocina y ahí lo pudo ver. Nico buscando desesperadamente un plato para se servirse muy felizmente el desayuno, preparado por su amoroso novio.
Victor suspiró y negó con la cabeza en cuanto chocaron miradas.
—¿Qué es lo que esperas, papi? Ven a comer, el desayuno es la comida más importante del día.
El pelinegro de acercó para servirse también.
—Ahora puedo ver que amas más a la comida que a tu propio novio.
—Bueno, si tanto te molesto... Puedo comer otra cosa— Nico tomó con una mano la entrepierna del mayor y la soltó enseguida para irse a sentar a la mesa.
Victor no dijo nada, pero rió en voz baja mientras también se servía panqueques.
Sabía perfectamente la debilidad que tenía Nico por la comida, y a pesar de que no estaba de acuerdo, ahora sabía cómo levantar a su baby de la cama.
@HiCody_
(Editado)
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APARIENCIAS [Daddy and Baby Boy] [Gay]
RomanceNicolás, un joven de veinteañero que cursa su último año antes de la universidad, que conoció al amor de su vida en un lugar... inesperado. No era un compañero de escuela, ni siquiera era de su generación. Víctor, un CEO respetado y exitoso, quien t...