Alive (Jay Jo) EDITANDO

Cap, 1.- "No fue un buen dia"

No fue un buen día.

¿Cómo es que una historia puede comenzar con un inicio tan negativo? como:

 "no fue un buen día".

Pues, para la pobre de So Tzuyu, lo fue totalmente. Recapitulemos un poco el contexto de tan desafortunado inicio de historia...

So Tzuyu comenzó un día normal. despertó gracias al ruido proveniente de su alarma que posaba sobre su mesita de noche, cuando los sentidos volvieron a ella, tomó el pequeño artefacto y de pronto sin previo aviso lo arrojo sin pudor al otro lado de la habitación, antes de siquiera volverse a arropar en sus cobijas importarle poco la hora, la puerta de su habitación fue abierta de forma abrupta por su padre.

—¡Buenos días! Despierta Tzuyu, tienes que ir esta vez a la escuela.— el propietario de la voz divago por la MUY desordenada pieza pisando una que otra cosa que hacía doler sus desnudos pies "definitivamente la habitación necesitaba ser ordenada y limpiada pronto".- pensó este se planto frente a su hija la cual seguía en cama está se descubrió un poco su rostro mostrando apenas su desordenado cabello y ojos grisáceos mirándolo con atención.—has pospuesto asistir a tu nueva escuela por más de una semana, no puedo cubrirte más.— señaló.

Pero en lugar de ser consciente y hacerle caso a su progenitor, esta volvió a cubrirse restándole importancia. Inmediatamente una vena se marcó en la frente de So Suho , quien tomó la colcha que cubría a la chica quitándosela rápidamente ya fastidiado.

—¡Jesucristo, solo déjame dormir por favor!.— se quejo la menor sentándose en la cama frotando sus ojos esperando superar el trauma de haberse levantado, sabía que su padre tenía razón, pero se negaba a la opción de sqlir fjera de sj cama.

—Te he dejado dormir los días anteriores, es momento de que salgas de nuevo.— este se sentó a un lado de su hija para tener una pequeña pero necesaria charla, la pelinegra le de reojo, pero sintió la palma de su padre en su hombro en forma de apollo.—se que no es fácil superar la depresión, pero el mudarnos a un departamento diferente y dejar la casa significaba un nuevo comienzo.— esta lo miro sin ganas, pero se sintió culpable al ver las marcadas ojeras en los ojos de su padre.

No era la única que sufría para esos momentos. Pero como le costaba tomar las riendas de aquello.

—Esta bien, iré a la escuela, la mento mucho los problemas.— el mayor sonrió complacido, se levanto para salir de la habitación más calmado y con una sonrisa feliz en su rostro, cuando salió la cjics soltó un vago— vaya mierda.— suspiro frustrada cubriendo su rostro con sus manos. Para dejarse caer sobre su cama nuevamente, no para dormir, solo para tratar de asimilar su realidad.

La familia So, era de descendientes japoneses que se mudaron a Corea hace 4 generaciones atrás, la familia de Tzuyu, antes estaba conformada por su padre, su hermano mayor y ella claramente, su madre no formaba parte del cuadro hace mucho tiempo, no había muerto, simplemente un día, después de "ir a hacer unas compras" nunca volvió, fue como si la tierra se la hubiera tragado, aún con el equipo privado que su padre pago durante tantos años, nunca se supo de ella.

Era mejor creer que estaba muerta, incluso si no había cuerpo, creer que estaba muerta al menos era algo reconfortante. Nadie contesta a la incógnita de una desaparición, no se lo desea a nadie, como no se le desea que un ser querido haya decidido a mano propia irse de este mundo.