Daila empezó en el ballet cuando tenía 3 años, el ballet, es su pasión, su vida y por nada del mundo lo dejaría. Cuando tenía 16 años, conoció a un compañero nuevo, Lucas. Lucas era nuevo en la ciudad, era nuevo en su clase de ballet, guapo, extranj...
Mi alarma de las siete sonó, ayer me llegaron varios correos amenazantes y diciendo que hoy llegaba la tercera persona. Sara y yo, después de la muerte de mi madre no queríamos a otra persona pero por el bien de los demás lo tuvimos que hacer. Nos vestimos así:
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Desayunamos, y fuimos andando. Mi madre era la mujer más importante de la ciudad y por haber muerto todos los habitantes se quedaron en casa cómo ella hacía y trabajaban por casa en vez de normal, porque ella no salía de casa ni para trabajar. Llegamos a la estación de trenes, sé que ahora mismo ella en forma de fantasma estará con nosotras pero... Pasó un rato y el primer tren llegó, cómo siempre un barullo de gente. Vi a mi padre a lo lejos y mis ganas de llorar eran las máximas, corrí hacía él mientras lloraba y lo abracé lo más fuerte que puse. Lo que no sabía aún, era que Lucas, Olivia, Laura, Irene, Sara y May nos estaban mirando. Mi padre y yo nos separamos y tuve que contarles a todos lo que había pasado con mi madre.
-Ella... murió en una explosión.
Dije al terminar de explicar todo lo que había pasado, a partir de ahí, me di cuenta de que aunque mi madre se haya muerto eso no significa que no pueda seguir con mi vida, al revés, puedo continuar con mi vida perfectamente solo que en vez de acompañada de mi madre en físico, pues me acompañará mentalmente. Los seis abrazados, nos fuimos a casa.
