- No es cosa de jóvenes (T/N)

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Era tarde, las calles frías y desoladas de la ciudad se hacían notar, miércoles, nada más aburrido que salir del trabajo sin energía queriendo llegar a casa de una sola vez. ___ Paseaba por ahí en camino a su hogar, el día había sido agotador, solo corría por su mente el tener que trabajar hasta que llegue el próximo año universitario, había estado ahorrando mucho para su carrera y había puesto mucho empeño en esto.

― Que día de mierda. ― Dijo al dejar salir un suspiro pesado, ya se encontraba cerca de su casa, le habían hecho sobrepasar el horario habitual por clientela extra y eso le enfadaba bastante.

Buscó sus llaves desesperadamente en sus bolsillos mientras entraba a la residencial, se dirigió al ascensor, tocó el botón de subir y esperó a que llegara este mientras aún buscaba las codiciadas llaves pero esta vez en su bolso.

Se escucharon las puertas del elevador abrirse y se fijó para ver que estaba vacío, se subió y marcó el piso 6. Continúo revisando y por suerte encontró las llaves, esperó a que el elevador subiera hasta su piso y salió de este, entró a su departamento y se encontró con la agradable sorpresa de su compañero de piso, Dee.

― ___, ¿Por qué tardaste en llegar? Es muy tarde. ― Aquellas palabras hacían estremecer, ese chico era muy monótono en su manera de hablar y su mirada seria lo acompañaba. El ambiente oscuro iluminado solo por la televisión en volumen bajo y dos lámparas que estaban ahí.

― ¡Hola Dee-!... ― El de cabello rubio le hizo una seña de levantar la mano para que se callara y procedió a hablar.

― Responde de inmediato, sabes bien que estas no son horas de llegar. ―

― Horas extra... ―

― ¿Al menos preguntaste si te darán más paga? ―

― Pregunté pero me dijeron que no porque debía de esforzarme más. ―

― Osea que te están explotando. ―

― Supongo que... ¿Sí? ―

Un suspiro malhumorado se hizo notar en el departamento, el sofá sonó levemente al ser de cuero, la televisión quedó pausada.

― Debes hacerte respetar, ___. No seas estúpida.  ―

― Pero es el único trabajo estable que tengo, no puedo enfrentarlos o me despedirán. ―

― Nada de peros, mañana no vas a ir, te quedarás acá. Mis padres y hermano van a venir y hay que limpiar tu habitación, recuerda que revisan todo. ―

― Es cierto, pero... ¿Me darás algo a cam-. ―

― Yo pagaré el internet, el gas y el agua además de mi parte de la renta. ―

― Bien, es un trato, mañana yo limpio. ―

― Gracias, ahora ve a ducharte, pone esa ropa que llevas a lavar y duérmete.  ― Y tan pronto como Dee dijo esto, ___ fue al baño y se quitó la ropa para meterse a duchar.

Ambos se habían conocido en el último año de secundaria de Dee, ___ era nueva, ambos entablaron conversación gracias a su hermano, Heavy, el cual era muy loco y ambos coincidían con eso, pero con el tiempo se fue calmando.

La noche o mejor dicho madrugada porque ya eran como las dos de la mañana fue una noche muy tranquila, cada quien se fue a su habitación y se durmieron y tan pronto como pasaron cinco horas, se escuchó como tocaban la puerta de la habitación de ___ soltando un quejido en respuesta.

― Ya me voy a la universidad, ___, vuelvo en tres horas para ayudar, luego tengo el día libre. ―

― Okeeeeyy... ―

― Te dejé desayuno, no tardes en despertar por favor.  ―

Se escuchó como Dee salía del departamento y dejaba cerrado, ___ se levantó desganada y se vistió con su ropa más vieja para dirigirse a su montón de ropa sucia agarrándola y dirigiendose al cuarto de lavado. Metió la ropa a lavar y se fue a la cocina a limpiar los muebles y fregar los platos seguido de las ollas y vasos dejándolos en el lugar donde se secan.

La tarde transcurrió normalmente, un poco de música, algunos capítulos de My Little Pony. Al llegar Dee este quedó sorprendido, el lugar había quedado muy limpio, incluso los ventanales, se fijó que ___ estaba tranquilamente dormida en el sofá, fijándose en que la televisión mostraba algo llamado "Caso Cerrado".

― Parece que te esforzaste bastante, descansa ___, yo te despertaré cuando lleguen a casa mis padres... ― Dijo Dee, la miraba con calma mientras le acariciaba el cabello suavemente, le encantaba aquella chica, era única en su clase, pero en realidad era normal.

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Hola Dario :)