Líder ─── KookV

❛ 领导者 ❜ ─── OO2

─── (🖤)

Todos los sentidos del Omega de hebras grisáceas se activaron en un santiamén al abrir sus ojos, había despertado y con un solo fin.

Escapar.

Si bien ya se había fugado de su manada con agilidad y pura suerte, ahora que tendría que escapar de una manada que no era la suya y ésta vez rogaría por correr la misma suerte, teniendo que asegurarse de ser lo más silencioso posible para poder hacer ese hecho cometido.

Observó toda la habitación que solo era ocupada por él en ese momento, tomando asiento sobre la cama y palpando el área de su pecho con algo de fuerza sin haber recordado siquiera la herida que mantenía allí, sintiendo un enorme dolor invadir su brazo derecho el cuál comenzó a temblar por los bruscos movimientos que había hecho. TaeHyung respiró profundamente para poder apaciguar siquiera una cuarta parte del dolor que recorría las puntas de sus dedos hasta su pecho.

Por lo menos estaba curada, lo cuál era un alivio para él.

Se puso de pie y observó por la pequeña ventana al lado de la cama, notando que apenas se podía divisar el sol entre las espesas nubes grisáceas que cargaban muchísimos copos de nieve, los cuáles caían elegantemente hacia el suelo.

Desvió su atención del exterior, pensando en que debería buscar algo para abrigarse.

Sus ojos divisaron un mueble y sus pies corrieron hacia allá, manteniendo en mente que no sabía cuanto tiempo podría tener para escapar, así que decidió dejarse llevar por la adrenalina que recorría su cuerpo. Empezó a abrir los cajones, quejándose de vez en cuando al ejercer fuerza en su brazo herido, pero después de buscar bien, encontró una camisa desgastada que le serviría para cubrir su torso desnudo.

Sostuvo la manta gruesa que estaba sobre la cama y con la cuál se cubriría parte de su cuerpo, guardando unas pequeñas tijeras sin mucho filo en el bolsillo delantero de su pantalón.

La presión y tensión de la situación provocaron que su forma híbrida saliese a flote sin darse cuenta, mostrando unas orejitas blancas y felpudas que estaban atentas a su alrededor junto a una larga cola esponjosa, sin embargo, prontamente TaeHyung se percató y cubrió sus orejas con la manta, acercándose a la manija de la puerta y abriéndola lentamente.

Primero asomó su cabeza, observando hacia todos lados al mismo tiempo que escuchaba con más certeza los sonidos a su alrededor gracias a su forma híbrida; después tocó la gruesa capa de nieve con sus pies descalzos, sintiendo como su piel se empezaba a quemar ante el contacto. Cerró la puerta tras sí sin hacer mucho ruido, mirando a su entorno.

Se dejó guiar por un estrecho sendero que se encontraba en medio de dos viviendas y decidió seguir por ese camino luego de divisar los gigantes pinos cubiertos de nieve a lo lejos, dejándole en claro que el bosque estaba cerca. De pronto, la enorme necesidad de poder irse de allí lo invadió después de no percibir ninguna presencia a su alrededor.