Una razon para luchar. Levi x Lectora x Erwin - TRADUCIDA

Capitulo 27

Caminaba por los pasillos de la residencia de Laurie buscándolo. ¿Dónde está? Suele estar siempre en su despacho a estas horas. Necesito hablar con él sobre nueva información sobre Lord Reiss.

Oigo unas voces alzadas mientras camino por uno de los pasillos, una de ellas parece definitivamente la de Laurie. Al acercarme a las voces, veo a un guardia al frente. Si tenía alguna duda de que la voz perteneciera a Laurie, ahora estoy 100% seguro de que está allí.

He visto a este guardia en particular muchas veces, y su cara siempre se pone roja cuando le hablo. Así que debería ser fácil deshacerse de él.

-¡Tom! ¡Hola! Es muy raro que me encuentre contigo, de hecho estaba pensando en ti-. Le doy mi mejor sonrisa falsa de Peitho, haciendo que su cara y su cuello se pongan completamente rojos.

-H-hey P-Peitho-, tartamudeó mientras le sonreía, -¿Qué haces aquí?-.

-Estaba buscando a Laurie, ¿está ahí dentro?- Trato de acercarme a la puerta pero él me bloquea el paso.

-Lo siento, no puedo dejarte entrar, tiene una reunión con alguien muy importante-.

-Oh, no hay problema-, me esfuerzo por mantener mi sonrisa coqueta, -esperaré aquí fuera como una buena chica. Oh, en realidad es una suerte que me haya encontrado contigo. Estaba buscando a Laurie porque oí a algunas chicas hablar de un extraño que merodeaba por los dormitorios. Estaba pensando que si no puedo encontrar a Laurie debería buscarte a ti. Por eso estaba pensando en ti, eres el único guardia en el que confío que puede ir a buscar a esa persona y hacerla pagar-.

Tom hinchó un poco el pecho ante mis palabras: -Sabes que siempre puedes contar conmigo, Peitho. Me ocuparé de esto ahora mismo-.

-¡Muchas gracias, Tom!- Digo alegremente mientras me levanto sobre las puntas de los pies para plantar un beso en sus labios. Estaba tan sorprendido que todo su cuerpo se congeló, -No te preocupes, Tom. Me quedaré aquí fuera y seré una buena chica vigilando la puerta mientras tú vas a comprobar la situación. Pero no tardes mucho, esperaré ansiosamente tu retorno-.

Me muerdo el labio inferior seductoramente mientras él me dedica una sonrisa aturdida y se dirige en dirección a los dormitorios de las chicas. Demasiado fácil. Abro lentamente la puerta una rendija para poder escuchar las voces dentro de la habitación con un poco más de claridad.

-No puedo conseguirte más líquido cefalorraquídeo, Harvey-, oigo la inconfundible voz molesta de Laurie. -No te pagamos para que hagas preguntas, ¡trabaja con lo que te damos y haz lo que te dicen!-.

-Lo entiendo, Lawrence-, oigo otra voz masculina que no reconozco, -¡Pero sólo puedo experimentar con tantas muestras con un solo frasco! ¿Qué quieres de mí? No puedo hacer líquido cefalorraquídeo sintético, no serviría para lo que me pides-.

Me inclino un poco más porque las voces parecen ser cada vez más silenciosas, hasta que sólo oigo palabras amortiguadas que no puedo distinguir. Aunque no puedo entender lo que dicen, siento que mi cuerpo reacciona a lo que dicen.

Siento que mis cejas se levantan y mis ojos se agrandan cada vez más. Siento que sonrío mientras mi corazón late cada vez más rápido por la excitación. ¿Qué está pasando? ¿Qué estoy escuchando?

Sin previo aviso la puerta se abre y Laurie está de pie justo delante de mí, -¡Tú!- Me gruñe: -¿Qué coño haces aquí? ¿Espiando, Peitho? ¿De verdad? ¡¿Dónde está Tom?! Ahora os toca a los dos, zorra-.

Me levanta y me echa al hombro con facilidad y me lleva cada vez más lejos en las mazmorras bramando: -Si tanto quieres saber, Peitho-, puedo oír la sonrisa malvada en su voz, -te lo enseñaré-.