- Estoy listo para salir, Hyung.
Sin esperar a que el joven ángel agregara algo más, el mayor le dedicó una pequeña sonrisa y comenzó a caminar con dirección a la puerta principal de su hogar, con las llaves en su mano derecha, confiando en que el menor lo seguía por el suave sonido que producían sus pisadas sobre el piso justo detrás de él.
Con total confianza elevó su mano izquierda para poder abrir la puerta, cuando de pronto y justo cuando estaba a punto de tomar la manija resplandeciente, alguien se le adelantó, abriendo antes que él la puerta, pero desde fuera de la casa, dejando ver a sus padres recién llegados.
El pelinegro no pudo evitar sonreír aún más al verlos, con todo el alboroto de la mañana no se había dado cuenta de que ambos adultos aún no habían llegado a la casa después de la cena que habían mencionado la noche anterior.
Sin pensarlo dos veces se lanzó a los brazos de sus mayores para darles un gran abrazo a ambos, causando múltiples risas provenientes de los recién llegados, incluso provocando que el pequeño rubio riera suavemente mientras admiraba la bonita escena, parecía un reencuentro después de años sin haberse visto, a pesar de que apenas habían pasado unas cuantas horas desde la última vez que el de mechas azules había visto a su madre y padrastro.
- Ay Yoonie, ¿Tanto nos extrañaste que nos estabas esperando justo en la puerta?
El mencionado soltó una risa mientras negaba suavemente, separándose un poco para poder hablarles con claridad.
- No, realmente pensaba que estaban arriba durmiendo, fue casualidad que justo llegaran cuando nosotros vamos saliendo.
Las miradas de confusión por parte de la pareja no tardaron en llegar después de haber escuchado la respuesta del pelinegro, durante unos segundos se quedaron en completo silencio, esperando que el menor continuara con la explicación antes de tener que preguntarle ellos mismos.
YoonGi notó sus miradas y dejó escapar una ligera risita.
- JiMin me pidió que le enseñara un poco el barrio, así que íbamos saliendo para que lo conociera.
Ambos adultos asintieron al mismo tiempo, causando nuevas risas en los más jóvenes por su perfecta sincronización.
Una sonrisa se instaló en los labios de la fémina en cuanto las risas cesaron y pasó con rapidez hacia el interior de su hogar, seguida de cerca por su marido.
- Bien entonces, vayan con cuidado y traten de llegar antes de la hora de comer, ¿Si?
Con un último asentimiento de parte de YoonGi, ambos adultos se dirigieron hacia las escaleras, perdiéndose de la vista de los más jóvenes en cuanto subieron el último escalón, seguramente con rumbo a su habitación para cambiarse aquella elegante vestimenta con la que habían salido el día anterior.
JiMin comenzó a dar pequeños saltitos sobre su lugar, con cada segundo que pasaban dentro de aquella casa se inquietaba más y más, el sólo quería salir rápido para poder conocer de una buena vez este nuevo mundo en el que se encontraba, y YoonGi parecía perdido en su propia cabeza ya que miraba un punto fijo en las escaleras, completamente inmóvil y con un rostro inexpresivo.
Con algo de temor a ser regañado por interrumpir al mayor en lo que fuera que estuviera haciendo, dio unos pasos hasta quedar justo a su lado, llevó su mano con lentitud hasta el hombro del más alto y con suavidad lo movió, tratando de llamar así su atención, cosa que funcionó.
YoonGi sacudió suavemente su cabeza al sentir el ligero movimiento y miró al joven rubio, inmediatamente se avergonzó al haberse perdido en su propia mente cuando debía estar llevando al menor a dar una vuelta para conocer.
ESTÁS LEYENDO
˗ˏˋαηgєℓˎˊ˗ || 𝐘𝐨𝐨𝐧𝐌𝐢𝐧
FanficPark JiMin es, literalmente, un ángel caído del cielo. Min YoonGi es tan solo un humano que por mera casualidad u obra del destino acabo conociendo a JiMin. Ambos harán hasta lo imposible para estar juntos, aún si eso significa abandonar absolutamen...