Introduccion

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Me di cuenta de lo mal que estaba cuando un día, en clase de física el profesor hablaba sin parar y yo no escuchaba nada por pensar en él.

Conocí a Colton en el verano, es ese chico al que no todos notan, es guapo pero sin exagerar, trabajador y estudioso, aunque recientemente empezó a ser conocido con su banda.

Colton tiene 20 años y vive en un lindo apartamento a la afueras de la ciudad con dos amigos, lo conocí en el cine, yo iba con mis amigas y el estaba solo, no por que no tuviera con quien ir, sino porque no había nadie a quien le dieran ganas de invitar, tan pronto como lo vi me atrajo y fue él quien tomó la iniciativa de hablarme, me sonrió y se me acerco mientras compraba.

-Hola ¿tienes 2 dólares que me prestes? - me dijo con su siempre encantadora y seductora sonrisa.

-Si - dije titubeando mientras sacaba el dinero de mi bolso y le tendía el billete- aquí tienes.

-Gracias - Sonrió de medio lado y se fue a la confitería.

De solo recordar ese momento se me pone la piel de gallina, sus ojos cafés oscuros, muchos dirían que es un color normal, pero realmente no es el color, sino la manera en la que mira, como se comporta tan amable con todos, su bella sonrisa de lado que es frecuentemente utilizada y me derrite, y amo cuando levanta una ceja y me mira.

Ese día entramos a la misma película y el "casualmente" se sentó a mi lado ya que el puesto estaba desocupado, nuestros brazos se rozaban y básicamente no recuerdo de que trataba la película, porque no le preste atención, solo tenía ojos para ese chico de mirada amable y linda sonrisa que estaba a mi lado.

Al salir de la función me devolvió los dos dólares.

-¿No los necesitabas? - me reí.

-Solo necesitaba una excusa para hablarte - dijo con su sonrisa de medio lado.

-Ah, por eso vienes a cine, sueles ligar con chicas- dije con una ceja levantada.

-Oh Dios, has descubierto mi estrategia- reía.

-Bueno - dije lista para irme- gracias por devolverme el dinero.

-¿Y si me das tu numero? - preguntó - ya sabes por si necesito 2 dólares en otra ocasión.

Y así fue como comenzó, le di mi numero y una hora mas tarde recibí su primera llamada, que estaría seguida de muchas mas, me invitaba a "prestarle" dos dólares al día siguiente en una heladería y yo tan joven y tan vulnerablemente atraída hacia el le dije que sí.

Desastrosa Fama.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora