Capítulo 4

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Narradora

El tiempo entre Luka y Chloé siguió transcurriendo con total normalidad con la única diferencia de que ellos cada vez se volvían más y más cercanos, al punto que ya absolutamente nada podía separarlos, Chloé ha comenzado a sentir muchas y diferentes cosas por Luka. Lukas cada vez siente más y más cariño por Chloé y su hijo.

Afortunadamente para Chloé, Agami no ha vuelto a buscarla y mucho menos a Luka, ahora ya nada puede interrumpir la felicidad y tranquilidad que sienten y tienen.

Por otro lado, Kim está buscando la manera de arruinar la vida y felicidad de la madre de su hijo a cualquier costo, quiere que sea infeliz y que sufra y para lograrlo hará lo que sea.
No soporta la idea de que ella no haya vuelto suplicando su perdón por haberse ido con su hijo.

Le guarda un odio tan intenso y grande que sería capaz de lo peor con tal de cobrarle su abandono así tenga que lastimar a su propio hijo lo hará.

Un día Chloé que estaba tranquila con Adam sentado sobre sus piernas a la entrada de su casa, le llegó una llamada de un número que no tiene registrado en su lista de contactos, contestó por educación escuchando así una voz que le heló la sangre y la paralizó.

- ¿Cómo estás? Chloé..

- Qué quieres Kim.

- ¿Acaso no puedo saludar a la madre de mi hijo?

- Te recuerdo que no quiero saber nada de ti.

- ¿Pero por qué no? Vamos cariño yo sé que me extrañas.

- La seguridad de mi hijo es primero y yo jamás podría extrañar a alguien cómo tú, eres un peligro para mí y sobre todo para Adam.

- Llamé para decirte algo querida, y es para advertirte que te cuides mucho y que sobre todo cuides muchísimo a Adam porque.. nunca sabes cuándo algo malo pueda pasarle y tú no puedas hacer nada al respecto..

Termina su amenaza para reírse al final, Chloé corta sintiendo lo acelerado que está su corazón, ella abraza a Adam contra su pecho y entra a la casa sintiéndose muy asustada por dentro, recuerda todo lo que vivió junto a su bebé cuando aún permanecía con Kim y todo lo que él les hizo y más se llena de miedo.

Sus manos tiemblan pero aún así no piensa soltar a su hijo.

- No te preocupes mi amor te protegeré de quién sea porque además...

Acaricia un lado de su rostro.

- Tu papá me hizo entender que no es una buena persona y que debo protegerte de él más que de cualquier otra persona..

Chloé trató de seguir con su vida normal cómo si Kim nunca la hubiese contactado, para poder vivir tranquila lo ha conseguido lentamente pero pudo aunque aveces duda y piensa en la llamada.

Una noche escuchó el llanto de su hijo e inmediatamente se levantó para ver qué le pasaba. Solo se despertó por hambre pero aún así Chloé no puede dejar de sentir miedo, el miedo es mucho más fuerte que su tranquilidad, no es fácil olvidar algo cómo eso y menos para ella. Kim no es alguien que no cumpla lo que dice y Chloé lo sabe perfectamente, vivió un infierno con él y ahora el miedo de que él los encuentre y les haga daño, sobre todo a su hijo es aún peor,.

- Calmate Chloé él no ha vuelto a llamarte asique todo estará bien, tal vez solo lo dijo para asustarte.

Se dice a sí misma tratando de convencerse de que todo eso solo es una exageración, que Kim no llegaría a tanto y menos porque se trata de su propio hijo, quién lleva su sangre.

Así como aquella vez en la que Kim amenazó con cortarle el cuello a Adam, pero solo fue para asustar a Chloé. Ella piensa que puede ser lo mismo en este caso que él solo quiere asustarla nada más cómo venganza por haberlo dejado, o eso quiere creer su mente una voz le dice que esta vez todo es muy diferente y que Kim no está bromeando y mucho menos intentando asustarla pero Chloé intenta ignorar esa voz interna que la inquieta y mantiene en alerta a cada momento.

Por Él [En corrección] Lukloé.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora