Capitulo 16

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  Capítulo 16

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Capítulo 16

— Mejor me voy — empecé a caminar rápidamente a la salida.

— Espera — me dice mi padre y me detengo ¿Es escuchado bien? — ven, te mostraré algo — me giro y él me está sonriendo, señor gracias. Me uno a él y empezamos a caminar — ponte esta bota — me pasa una bota de mis tallas negras.

— Son de mis tallas — murmuré más para mí que para él.

— Son tuyas — le sonrió — la tenía ahí esperando a que baje a la granja, nunca vienes — ¿Como crees que voy a venir si a quien trato de evitar siempre es a usted? Sonrió para mí misma, es raro yo estar aquí porque no me gusta cruzarme con mi padre, es muy molesto, aunque hoy está diferente.

Camino muy lejos de casa, pero seguimos aún en la misma área que pertenece todos a casa, mi padre me muestra dos monos.

— Se lo compré a unos de mis hermanos, lo compré pensando en ti, no sé cuál es tu animal favorito — nunca me pregunta nada — quise comprar dos, uno para ti y uno para Bryan — ya me imagino a Bryan con un mono, me rio para mí misma — cuál de los dos te gusta — hay unos que es marrón y hay otros que es negro.

— El marrón — lo señaló.

— Ponle un nombre — pienso.

— Gruñón le pondré — mi padre me mira y me sonríe.

— Eres mala para los nombres yo le pondría Mar por qué es marrón — Mmh.

— Mar Gruñón — mi padre ríe a carcajadas.

— Ahora está mejor ¿Quieres alimentarlos?

— Si, pero en otra ocasión papá, tengo que hacer algunos trabajos de la escuela, muchas gracias por este día — le sonrió — ¿está bien si vuelvo mañana? — preguntó insegura.

— Puede venir cuando quieras, esta granja es tuya querida.

Me dirijo a casa nuevamente, tenía que aprovechar ese momento para pedirle permiso. Cuando abro la puerta mamá, Bryan y Brandol están viendo televisión.

— ¿Se puede saber dónde estaba? — me pregunta mi madre.

— Estaba con papá en la granja — le digo sonriendo, me dirijo a la cocina, tomo el tarro de agua, tengo tanta sed que no me molesto en buscar un vaso si no que me pego del tarro del agua miro para la sala para saber que mamá no me está mirando, me pego y comienzo a tomar agua, está rica, siento un golpe en la cabeza, pero fue un golpe con un control, el control de la televisión, me despego del tarro y me giro para saber quién fue que me golpeó, veo a mamá con cara de gruñona.

— Siempre es lo mismo con ustedes mala costumbre — me quita el tarro y lo coloca dentro de la nevera — yo quisiera volver a encontrarte en esa sinvergüenzada — me golpea de nuevo en la cabeza con el control — ¿Dónde estaba?

— Estaba con papá en la granja.

— A mí no me engaña Ava.

— Y por cierto me regalo un mono — ella sonríe y los ojos le brillan.

— Es malo para los regalos — sonreímos — recuerdo que la primera vez que intento conquistarme tenía catorce años y me regaló un desodorante ¿Puede creerlo? — ríe — mis amigas se burlaron de mí y me preguntaron si era que yo olía mal porque él me regaló un desodorante, vote el desodorante en el zafacón — reímos con ganas.

— Me gusto el mono, aunque hubiera preferido un perro ¿Sabes cómo se llama? Mar Gruñón.

— ¿Por qué ese nombre?

Quiero ser bonita.✔️ #1/ En ediciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora