✨Una dosis de ti✨

Capítulo 6

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~POV Sakura~

Me miré al espejo por última vez...

El corrector bajo mis ojos era más generoso que otros días, gracias a las ojeras con las que había amanecido por no pegar el ojo en toda la noche.

Las palabras de Sasuke resonaban en mi cabeza minuto tras minuto, no sabía exactamente como interpretar lo que dijo, no estaba segura de si sentía algo por mí o si solo era un simple capricho suyo, y me dolía, ya no quería ser su juego, tal vez lo que yo quería era una relación estable, pero el único problema es que deseaba que fuera con él y evidentemente, eso no podría ser.

Limpié mis manos en mi ropa en medio del compendio de todas mis frustraciones y después de soltar un suspiro con tensión, decidí bajar a desayunar frente a esos dos hombres que terminarían por volverme loca cualquier día de éstos.

Al entrar lo primero que vi fue a Chiyo en la estufa y a Itachi sentado en el pequeño comedor sosteniendo un periódico del día sin Sasuke merodeando por allí. Apreté mis puños para tomar valor y entré con una gran sonrisa.

—Buenos días— Itachi al escucharme me sonrió enorme y la señora Chiyo solo me miró con curiosidad mientras me sentaba frente a Itachi.

—Buenos días, Sakura, ¿qué tal tu fin de semana?— Preguntó Itachi con los ojos iluminados y mis dedos comenzaron a jugar entre ellos.

—Muy bien, gracias— Mi vista se dirigió a Chiyo que se acercaba hacia a mí en la mesa y mi vergüenza apareció al recordar lo que había precensiado la noche del viernes—Buenos días, Chiyo.

La indiferencia de su rostro fue sustituida por una sonrisa sincera que me sorprendió al verla —Buenos días, niña Sakura— Dejó el plato sobre la mesa y mi expresión seguía siendo la misma —Aquí está tu desayuno.

Me quedé sin habla por unos segundos, imaginaba que podía estar molesta o de menos indignada por el intenso beso que vio en ésta misma coina, pero tal vez Sasuke ya había hablado con Chiyo.

Recuperé mi expresión normal al ver que Itachi nos veía curioso y le sonreí de la misma manera —Muchas gracias, Chiyo.

Se alejó con una bonita sonrisa en su rostro y pude sentir que mi pesadez disminuía sobre mis hombros.

«Un problema, menos... Creo»

Mi aura comenzaba a sentirse más blanca y transparente, Chiyo no se mostraba como yo había sospechado, pero de cualquier manera, trataría de hablar con ella y no dejar ésto inconcluso con una mujer importante en la vida de los Uchiha.

Sentí mi cuerpo más liberado junto con mis pensamientos, hasta que las conocidas pisadas de Sasuke se escucharon cada vez más cerca.

—Buenos días a todos— Sasuke entró con una sonrisa bonita y un semblante que pocas veces había visto, dio un beso en la frente de su nana y apretó con aprecio el hombro de su hermano.

Todos nos quedamos sorprendidos ante su repentino cambio y era obvio que Itachi no se quedaría con la duda.

—¿Y a ti que te pasa?— Preguntó burlón el mayor de los Uchiha —Estás muy animado hoy.

Sasuke dejó ver una sonrisa que jamás había visto dejándome más impresionada y su respuesta parecía ser sincera —Éstos días han sido de locos, pero anoche me confirmaron algo que me hace muy feliz.

Todos lo miramos curiosos y aunque presentía a lo que se refería, no quise engancharme de una ilusión estúpida.

—¿Ah, sí?— Itachi se irguió galante llevando sus dedos a su barbilla —¿Y se puede saber qué es?