✨Una dosis de ti✨

Capítulo 9

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~POV Sasuke~

Los invitados comenzaron a llegar uno tras otro, les ofrecí a todos y cada uno una sonrisa con amabilidad, con cordialidad por haber asistido a tan ridículo evento, donde el cumpleañero permanecería encerrado como muñeco en aparador dispuesto a que todos lo vieran tras el cristal donde se refugiaban sus lamentos.

Donde mi desespero porque ésta noche terminara pronto nunca había sido tan grande.

No me molestaba el hecho de que la gente que le tenía afecto a mi padre viniera a celebrar con él de una forma poco común, tampoco me molestaba que todos rieran y disfrutaran del evento, lo que me frustraba, era no podía dejar de pensar en una pelirrosa de ojos hermosos y cuerpo despampanante, y por eso, todo me parecía irritable.

No, no me molestaba que la gente que llegaba me decía que había crecido demasiado, como si fuera un crío de quince años que había dado el estirón. Tampoco me enfadaba el hecho de que mi hermano andaba por toda la casa con una sonrisa enorme saludando y recibiendo a todo el mundo, mucho menos me nervaba sentirme apapachado por mis tías adoradas y criticonas que presumían a sus hijos perfectos y sus vidas perfectas.

Lo único que me dominaba, era la impotencia y la rabia conmigo mismo por no poder ser claro con la mujer de mis sueños, por no tener que doblegar mi ego al rogarle que me escuchara para decirle cuanto la amaba.

Lo que odiaba, era tener que verla todos los días y confirmar, que estaba absoluta y perdidamente enamorado de Sakura Haruno.

—¡Qué lindo quedó todo!— Espetó mi tía con más entusiasmo del que yo podría soportar —¡Me da tanto gusto verte, Sasuke! ¡Sigues guapísimo!

—Igualmente, tía Naori... Tan bella como siempre...— Recibí un abrazo junto con un beso hipócrita en la mejilla y di uno igual —Me alegra que te haya gustado.

—¡Y que lo digas!— Soltó una risa de esas de mujeres exageradamente finas —¿Y ya tienes novia? ¿O me vas a decir que quieres seguir más tiempo soltero o que eres gay?

—¡Sigo soltero, tía Naori, y muy machito!— Reí fingido de la misma manera dando un solo aplauso exagerado —Y... ¿que hay de mi prima, Kutzuy? ¿Ya por fin alguien le hizo el favor de darle el anillo de bodas? ¿O es que aún no encuentra alguien que la soporte?

Su sonrisa fingida desapareció para abrirle pasó a una mueca de indignación y alejarse de mí con un "¡Hmp!" y barbilla alzada.

Reí en silencio, pero con muchas ganas, tenía tantos ánimos de verla solo para poder responderle de la forma que se merecía por entrometida y criticona.

Tomé un whisky que uno de los meseros me ofrecía y mi hermano finalmente llegó para estar conmigo.

—No tenías que responderle de esa manera a la tía Naori— Dijo tomando un whisky también mientras sonreía.

—Ya era hora de que le diera una cucharada de su propio chocolate— Di un trago a mi bebida sin pena alguna —Dice un dicho, "Con la vara que midas, serás medido" y la verdad, no pensé que sería tan gratificante ver su cara después de decirle que a su hija nadie la quiere por creída.

Itachi soltó una carcajada para luego beber de su vaso de cristal —Eres terrible— Miramos un momento a todos los invitados, tal vez buscando lo mismo —Oye, ¿y Sakura? No la veo por ningún lado.

—No lo sé, hace más de una hora que llegó y no ha bajado— Mi sonrisa se borró completamente para poder terminar mi whisky de un solo trago.

—No puedo creer que esté aquí.