La esclava

Un cansado y aterrador viaje

El viaje era horrible, todas iban acinadas y atadas con cuerdas en sus manos, con grilletes en los pies, les daban de comer una especie de pan con miel y agua, por grupos las dejaban salir para realizar sus necesidades pero en realidad nadie lo quería hacer, pues los hombres con necesidad, tomaban a las jóvenes a su antojo, a todas excepto a Candy, que viajaba en el mismo barco que Albert dirigía y debían obedecer sus órdenes, mientras las jóvenes tenían miedo e incertidumbre a lo que su vida seria ahora, Albert ingreso a las bodegas y fue pasando joven por joven seleccionándolas, unas serian vendidas, otras serian enviadas a su rey y otras se quedarían con ellos para ser sus esclavas, las que venderían les tocaba del hombro, las que eran lo suficiente mente hermosas para servirle al rey les tocaba la cabeza y las que se quedarían con ellos, no las tocaba, paso por todas y cada una de ellas, hasta que llego a Candy, solo la vio de largo y siguió caminando, ella con miedo miraba al hombre que sin querer y de alguna manera le habia llamado la atención, esa mirada azul que ahora refulgía como un trueno, en los breves momentos que posaba la vista en ella......

Dios es tan bella se decia Albert tomándose la cabeza, pero sabía que no podía hacer nada le pertenecía a su padre, es una diosa como Fredja, se decia atormentado al sentirse atraído irresistiblemente por ella, cambiaria su vida de lujuria para al fin entregarse a la mujer que amaría, pero era prohibida para el o eso pensaba, no podía verla porque sucumbiría a su pasión y traicionaría a su padre, seria capaz de desaparecer con ella, con tal que solo fuera suya, se tenia que sacar esos pensamientos de su cabeza, pensaba viendo el mar atreves del horizonte..........

En ese momento escucho gritos de mujeres y reconoció la voz que le estaba haciendo vivir una pesadilla por lo intenso de las emociones que sin querer los unía.........

Candy habia salido con otro grupo de mujeres para respirar aire fresco, hacer sus necesidades y ver el horizonte, pero el viaje de Grecia a las nuevas tierras nórdicas era muy largo y los hombres tenían necesidad contenidas, pero ya no aguantaban mas, la belleza de Candy los atraía sobre manera pero era una mujer prohibida, sin embargo habian sucumbido a las bajas pasiones, aprovechando que eran pocas las que habian subido y ellos eran mas grandes y fuertes, no sabían que hacer estaban asustadas y rodeadas de rudos gigantes, uno por uno fueron tomando a las mujeres y al líder del grupo habian dejado a Candy que como liebre asustada lo miraba y un grito profirió de su boca, un grito lleno de miedo, aterrador, este le tapo la boca con la mano, para darle un mordisco en su cuello, un mordisco que imprimió para que nunca se olvidara de él, mientras que Candy daba un grito lleno de miedo y dolor, sintiendo que las grandes, gruesas y carrasposas manos levantaban su vestido , pasando sus asquerosas manos por sus piernas, Candy cerro los ojos ante lo inminente, no le daría el gusto de verla sufrir y cuando sintió que su vestido subía hasta la cintura, dejo de sentir aquel pesado cuerpo encima del suyo............

Momentos antes Albert habia escuchado un grito que le paralizo el corazón, sus piernas sin pensarlo e dirigieron al lugar al que lo habia escuchado.

Aquel grito que a un resonaba en sus oídos, llego y abrió los ojos ante el brutal ataque que la mujer que tanto le impactaba sufría, cegado y sin ver a nadie mas, tomo al hombre por el cuello saco un cuchillo de su kilt y lo paso por su cuello, segado por su enojo y lo paso por su cuello, segado por su enojo, lo tiro al suelo, pero al ver los ojos de cervatillo asustado de la mujer que le robaba sus sueños, bajo su vista y vio su intimidad desnuda, su boca se seco pero no se iba a convertir en su violador, no la tomaría asi, no traicionaría a su padre a un que se muriera en el intento, esa mujer no sabia el poder que tenia en los hombres, que con una sola mirada se podía convertir en su esclavo, la tomo en brazos bajándole el vestido, mientras el ardía de deseo y pasión, la llevo a su cuarto recostándola << duerme>> ordeno y salió tragando grueso de su cuarto para hacer paga a aquellos hombres que lo habian desobedecía, sabia que debía darse a respetar e ignorar sus órdenes merecían un rudo castillo, por eso a los hombres que lo habian desobedecido, los amarraron a un mástil de las embarcaciones, sin poder moverse de allí, hasta culminar su viaje a sus nuevas tierras; las mujeres regresaron a la bodega pero dándose cuenta del trato especial que el jefe habia tenido por Candy, algunas de sus antiguas esclavas se alegraban pues sabia que ella si jugaba bien sus cartas las podía ayudar, otras se llenaron de rencor y le deseaban lo peor, se sentían celosas pues ella siempre obtenía a los mejores hombres, a los lideres y además buen mozos en otras palabras ella solo tenia a los mejores sementales que habia.

Pronto llegaron al primer desembarcadero, en el que, en menos de un día, algunas mujeres eran vendidas como esclavas y de inmediato partirían rumbo a casa en donde sus familias los esperaban animosamente, sabían que estaban ansiosos por ver los tesoros obtenidos, además que ya habian pasado casi cuatro meses desde que se habian ido para asaltar la isla.

En las islas griegas, la medre de Candy habia tomado fuerza de flaqueza y en conjunto con la población sobreviviente recuperaban la isla y se preparaba para darle las malas noticias a los hombres de su casa y tomaran las mejores decisiones, a un que sabia que lo probable es que su amada hija ya estuviera muerta, por lo que a Aliestear le tocaría comprometerse con Patricia, pues la unión de ambas familias era imprescindible y debían pensar con cabeza fría por el bienestar de la isla.

-Asi que te saliste con la tuya ¡verdad! le dijo con una mirada fría a Patricia, mientras lagrimas de angustia surcaban sus bellas pupilas verdes.

- madre, no fue mi intención yo solo.......

- Solo querías al marido de tu hermana para ti, no fue por eso que gritaste, no se lo diré a nadie, pero me avergüenzo de tu proceder, te degastes guiar por los celos, por eso nunca serás feliz en tu conciencia y corazón tendrás la muerte de tu hermana, porque eso pasara en manos de esos barbaros.

- No madre, decia llorando Patricia enfrentando aquellas rudas palabras para conmover a su madre, a un que su corazón también saltaba de alegría de saber que ella seria la esposa de su amado Stear.

-Te saldrás con la tuya, pero eso no te lo perdonare, no porque te ame menos, si no por tu proceder, el que no fue el correcto.

Mientras tanto William mandaba una nota al rey, seleccionando una esclava para su familia, comprándola para que el no la mirara y deseara quedarse con el regalo que le tenía a su hijo.

Dos semanas después tanto en Escocia, como en las islas griegas los bracos desembarcaban recibiendo noticias en ambos lados, en uno buenas y en otras desgarradoras  pero ambas marcarian a lapoblación  y acrecesentaria la envidea, el odio, plantado en varios corazones  que se llenarian de envidea ...........

Continuara..........................................