Mejillas ♡kyman♡

Etapa #5: Unión🤍💞

❤❤❤

Apenas entraron al lujoso restaurante, Cartman no pudo evitar soltar un grito de admiración. 

Arrastro a Kyle por todo el lugar, mientras repetía sin cesar que era la mejor cita de todas, al parecer la vergüenza de llamar a su salida como "cita" se le había pasado desde hace un buen rato.

Kyle disfrutaba de ser jalado por todos lados por la pequeña y gordita mano del otro. Pero supo que debían detenerse, cuando vio en su reloj de muñeca que su hora de reservación en una de las mesas se aproximaba.

- Eric. - intento llamar la atención del emocionado chico.

- ¿No es grandioso Khal? - señalaba entusiasmado los nadadores que se lanzaban en picadas al agua.

- Lo es, pero ya deberíamos ir a comer.

-¡Diablos, es verdad! Como pude olvidarlo...

- Tranquilo, estamos a tiempo. - ajusto su agarre de manos y ahora era el quien guiaba.

La mesa que reservo se encontraba en uno de los mejores lugares para apreciar todos los espectáculos que ofrecía el lujoso restaurante, apenas se sentaron se acerco un mesero con una vestimenta muy curiosa.

-¿Que desean pedir los jovencitos?

Cartman paseo la mirada por el menú - Mmmh, bueno yo quiero...

Mientras el castaño dictaba su orden, y el mesero no dejaba de anotar, una pequeña gota corrió por la frente de Kyle, al parecer esta cita no le saldría nada barata.

Pero lo valía.

❤❤❤

Ambos sentían que los minutos pasaban más rápido de lo común, pero la emoción que sentían al estar en compañía del otro lo compensaba.

Cuando terminaron de pasear por cada rincón del restaurante, Eric aconsejo a Kyle llamar ya a su padre para que vaya a recogerlos.

Mientras esperaban al señor Broflovski, ambos enamorados estaban sentados en la fuente afuera del restaurante, envueltos en un cómodo silencio, mientras Kyle jugaba con la pequeña mano de Eric.

-Khal

-Dime.

 -...

-¿Eric?

-... Fue la mejor cita de todas. - el agarre del castaño se ajusto sobre la mano contraria, aunque su mirada aun se mantenía en otro lado. 

Con una sonrisa enternecida, el pelirrojo regreso el ajuste de manos - Lo se, no esperaba menos, la verdad. 

Tras ese comentario volvieron al silencio, la calle estaba en calma y aunque no era tan de noche aun, el el cielo se podía apreciar una bellísima luna.