31

415 48 7
                                    

Millie besaba a Sadie con tanta fuerza que sus labios dolían, la sentía bajo sus manos, estaba sentada en su regazo y era tan sólido, tan precioso

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Millie besaba a Sadie con tanta fuerza que sus labios dolían, la sentía bajo sus manos, estaba sentada en su regazo y era tan sólido, tan precioso...

¿Cómo podía no estar allí?

Las lágrimas resbalaban por sus mejillas, mojando su camiseta y la de Sadie.

—No te vayas, nunca te vayas —rogó.

—No te vayas, nunca te vayas —rogó

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
AM | SillieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora