Simón dice

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-Nos dividiremos en grupos de cuatro y atacaremos cada lado. Recuerden que la agente Manoban esta dentro. Ella nos mantendrá informados de todo lo sucedido. ¡No quiero volver a perder el rastro de Lee Jung-jae, así que quiero su mayor rendimiento!-

Hablo la australiana, con autoridad.

-Tenemos un problema.-

Informó uno de los agentes que se especializaba en computadoras.

-¿Qué pasá?-

-La agente Manoban no se reporta desde hace tres minutos.-

-¿Entonces que estás esperando?, ¡Búscala! Necesitamos entrar.-

¿Quiénes son estás personas? Se preguntaban las amigas que miraban todo los pasos de la más alta. La mujer caminaba de lado a lado.

-¿Quién rayos eres?-

En el momento en que Jisoo abrió la boca, todas las miradas se posaron en ellas. Poniendo a ambas mujeres nerviosas, y que se hundieran más en la silla. Se sentían tan pequeñas e indefensas frente a todo esos grandotes policías.

-Como dije antes. Soy agente federal y estoy aquí para atrapar a Lee Jung-Jae.-

-¿Quién es Lee...?-

Pregunto Jennie.

-Lee Jung-jae. Un asesino.-

Se adelanto a decir uno de los agentes que vigilaba el perímetro.

-Un secuestrador de menores.-

Dijo otro.

-Un psicópata, amante de la sangre.-

Agrego otro agente. Esta vez asustando a las chicas.

-Bueno, ya. Por sus caras de terror supongo que entendieron el mensaje.- 

-¿Qué busca en está Isla? Aquí solo hay pura suciedad. Encontrar algo valioso será como descubrir a América, y ni tanto.-

Salió la diva interior de la empresaria.

-El no busca "algo valioso".-

Rose hizo comillas con sus dedos.

-Lee busca a los Manoban.-

-¿Quiénes son los Manoban?-

-Es una larga historia.-

Miro a la pelinegra, después a la castaña y agrego:

-Que nunca les contare.-

Rose enseño su sonrisa más hipócrita y volvió a lo que hacía.

Tener a la castaña y a la pelinegra bajo su poder no era parte del plan. Anteriormente las había visto "conversando" y simplemente se metió para que se salieran del camino, ya que literalmente estaban estorbando las cámaras y solo se podía ver sus traseros bien trabajado. De ahí para adelante las chicas estaban atentas a todo su alrededor.

Revelado | JenLisaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora