Atrapado En Tu Locura (Omegaverse)

1. Reunión anual.

Advertencia: no apto para todo público se recuerda discreción y si son débiles de mente no lean.

Ten cuidado con quién confías, el diablo antes de ser diablo fue un ángel, y Judas antes de ser traidor fue discípulo.

-Bienvenidos a la 12va reunión anual de empresas para los futuros y futuras generaciones...

Ahí va de nuevo ese presentador, dando el mismo discurso de todos los años, con su misma voz característica y mostrando en su cara arrugada los años en los que alguna vez fue un buen mozo.

Este evento absurdo no era más que una vulgar estrategia para unir empresas a base de matrimonios forzados y al mismo tiempo tener contactos influyentes.

Desde los herederos de las futuras corporaciones, hasta los hermanos menores que viven bajo sus sombras, se reúnen aquí una vez al año para conseguir una pareja y elevarse a un estatus todavía más alto de lo que según ellos merecen.

Alphas, Omegas y Betas, parece un buffet de primera categoría, dónde venden sus cuerpos y donde a nadie le interesa el tonto discurso repetitivo de todos los años.

"El olor de las feromonas junto con los perfumes apestosos de los inservibles betas que usan para disimular que no emiten feromonas o fragancia alguna, resulta asqueroso para mi olfato y las luces de este cuarto son tan radiantes que llegan a molestar mi vista."

-Ahora levanten sus copas para dar inicio a un evento tan esperado -habló el presentador.

-¡¡Salud!! -dijeron todos en el enorme salón al mismo tiempo para después comenzar a charlar con los demás invitados.

La música clásica se hizo presente, junto al bullicio de la gente.
(me salió una rima :v).

-Minho, ¿qué haces ahí parado? -dijo una pelirroja caminando a su dirección, Doona-. La fiesta ya comenzó y tú pareces una estatua.

-Es solo que esta clase de reuniones me parecen algo aburridas -habló cuando la pelirroja se encontraba ya a su lado.

Ambos se encontraban entre tanta gente.

-De todos modos, hay que disfrutar, sabes que la entrada te cuesta toda una vida junta -dijo sonriente.

-Si, es bueno haber nacido en cuna de oro -dijo él devolviendo la sonrisa, mientras agarraba su copa de manera delicada, dando pequeños círculos-. Por cierto, te ves muy bien con ese vestido, por poco y no te reconozco -hablo-. ¿Quién dice que el hábito no hace al monje?

-Si, lo sé. Me dijeron que me esforzara para dar una buena impresión.

-No entiendo porque nos siguen trayendo aquí, después de todo, somos uno de los mejores y, ya estamos comprometidos.

-No necesitamos buscar una pareja -habló para después darle un trago a su copa de champagne- pero, si necesitamos encontrar buenos amigos.

-¿Te enteraste que el hijo de la corporación C regresó del extranjero? -hablo ella en voz baja.

-¿Corporación C? -preguntó Minho mientras bebía de su copa-. ¿Por qué no la había escuchado antes?.

-Como siempre Minho, solo te interesan los libros. Es el diálogo de toda reunión social -dijo ella tratando de explicarle-. Es una corporación que apareció de la nada pero ya supera a la mía y creo que muy pronto superará a la tuya.

-Como sea, veo que te interesa mucho esa persona -habló con notable celos en sus palabras-. Tal vez deberías acercarte a él como dijeron tus padres.

Ella se quedó un rato en silencio observando la expresión de Minho, le pareció tierna, verlo celoso era muy adorable, además de que rara vez ponía esa cara.