Capítulo #5

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Al día siguiente.

-A unas cuantas horas de recibir clases extra ¿estás nerviosa? -dijo Brenda mientras sacaba algunas cosas de su casillero.

-¿Nerviosa? ¿Es en serio Brenda? -reí- No es la gran cosa y no hay que tomarle tanta importancia ¿está bien?

-Sólo decía...

Nuestra última clase era Química, después de salir de ahí seguía tutoría.
A quién quiero engañar, no me pone nerviosa el hecho de que tomaré clases extra, sólo que no sé, soy muy curiosa y estoy digamos, impaciente, por saber quién será esa persona que me ayudará.

La clase de Química se fue volando y le pedí a Brenda que me acompañara al salón en donde me citó el profesor Evans. Al llegar al salón, había varias personas, no sabía distinguir entre los "tutores" y los menos inteligentes.
No miraba al profesor por ninguna parte, me despedí de Brenda, entré al salón y me senté en la parte de atrás, odio estar enfrente.

Todos estaban hablando, y no es que no sea sociable o algo así, pero se me hizo mejor ponerme los audífonos y escuchar algo de música mientras el profesor aparecía. Siempre lo he dicho y siempre lo diré, los audífonos son el mejor invento antisocial.

De rato el profesor llegó, todos tomaron asiento y un grupo de personas se quedaron de pie enfrente del pizarrón, o sea, a lado del escritorio.

-Buenos días a todos, que digo días, buenas tardes -dijo mirando su reloj- Bienvenidos, esta será la primera parte de lo que consiste la tutoría, para los que no saben exactamente cómo funcionará esto, en un momento se los explicaré, pero primero tomaré lista para ver quiénes fueron los que cumplieron con su palabra.

Empezó a mencionar nombres, en realidad eran muchas personas las que necesitan ayuda. No me sentí tan mal después de todo. Pasaron 15 minutos y el profesor continuó.

-Bueno, esto consiste así: cada uno de ustedes tendrá un tutor y esa persona sólo estará disponible para ayudarles a ustedes y solamente a ustedes ¿sí me entienden?
Los tutores son estos estudiantes que ven aquí, ellos tienen capacidad para ayudarles en cualquier materia, por suerte conseguí el mismo número de personas que necesitan de la tutoría y digamos, los tutores que me ayudarán -dijo el profesor.

- Miren muchachos, ya tengo las parejas que harán para trabajar, no para otra cosa -hizo una mirada coqueta y rió- Si se llega a dar el caso de que no se lleven bien con esa persona o algo así, pueden cambiar de tutor, no hay ningún problema, pero sólo se puede hacer el día de hoy ¿por qué hago esto? un ejemplo: la señorita Ana no se siente a gusto con su compañero Alex, pero este día no me lo dijo y viene después a decirme que le cambie de tutor, yo ya no podré hacer eso, porque los demás ya empezaron a trabajar y no los puedo interrumpir de esa manera y hacer que comiencen de nuevo ¿va? -todos movimos la cabeza en manera de afirmación.

– Entendido esto, proseguiré a asignar a los tutores. Ellos les dirán que días van a trabajar y ustedes les dirán el horario en los que estén disponibles para la tutoría ¿está claro?

Comenzó a asignar los tutores, me preguntaba quién sería la persona que me ayudaría con esto, si sería mujer u hombre ¿me agradará? ¿tendré que pasar la vergüenza de cambiar de tutor? De verdad espero que no sea mi caso.

-Kendall West -dijo el profesor.

-Aquí -levanté la mano.

-Kendall, tú trabajarás con Camila -¿Camila? ¿quién rayos es Camila? -pensé.

CAMILA POV:

¿Es en serio? Hay más de 30 personas aquí que necesitan ayuda y especialmente me tocó Kendall. No es que no me agrade o algo así pero de las pocas veces que nos hemos topado me he dado cuenta que no cualquiera le cae bien.

Kendall es la típica chica popular, pero no es de esas que su vida es color de rosa, no es reconocida por traer minifaldas o por que sea de esas chicas fresas, no. Ella es de ese tipo de personas que salen a fiestas cada fin de semana, que son amantes de la diversión pero son reservadas.

En las mesas de este salón caben 2 o 3 personas, por mesa. Así que es el lugar perfecto para ponerse 2 personas.
Kendall se sentó hasta la parte de atrás, me acerqué a ella...

-Hola Kendall, soy Camila -me senté de frente a ella, me miró por unos segundos y agachó la mirada.

-Genial... -dijo en voz baja, así como si no le hubiera parecido bien que me haya tocado con ella.

-¿Estás de acuerdo que sea yo quien te ayude? Si no te parece puedes decirle al profe Evans que te cambie de tutor, por mi no hay problema -dije algo nerviosa.

-En realidad no me sentiría cómoda con nadie de este salón, así que... No habría diferencia.

-Está bien -sonreí- Tengo entendido que tienes problemas con sólo una materia ¿No?

-Sí.

-¿Cuál es?

-Inglés.

-La tutoría será de lunes a viernes, después de clases, a la hora que tú quieras y estés disponible.

-Tengo práctica de natación una hora después de clases. Está bien a las 3 de la tarde ¿Cuánto durará cada "clase" por día?

-Es una hora, depende de ti si quieres más horas por día. La tutoría comenzará mañana.

-Ok.

El encanto ante todo, pensé. Esto no será nada fácil.

Ella, mi problema.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora