Ella, mi problema.

Capítulo #64

Katy llevó a desayunar a Camila a un restaurante cerca de la escuela. Quería llevarla a otro lugar pero no creyó conveniente ir ahí porque el lugar estaba aún más lejos y Camila tenía el tiempo contado.

–Y dime, Camila ¿Qué ha pasado en tu vida, algo interesante que puedas contarme? –preguntó Katy, tomando un sorbo de su bebida.

Camila estaba de frente a ella.

–Nada que te pueda interesar, todo ha estado muy aburrido... –contestó simplemente. Terminando su comida.

–¿Tu novia es aburrida? –preguntó con una sonrisa juguetona.

Camila rió un poco.

–Si quieres saber de mi pareja sólo pregunta...

–¿Cuál es su nombre? –preguntó Katy, mordiendo un poco el popote de su bebida.

–Kendall... –Camila sonrío al responder.

–¿Cuánto llevan de relación?

–No mucho...

–¿Semanas? ¿Meses?

–No mucho –volvió a responder, con una amplia sonrisa.

Katy terminó su bebida y después recargó completamente su espalda en el respaldo de la silla.
La chica de cabello oscuro estuvo así unos segundos, mirando a Camila, sin decir una palabra.

–Es extraño verte de nuevo y que estés tan cambiada –Katy suspiró.

–¿Cambiada? ¿A qué te refieres con eso? –preguntó curiosa, también recargando su espalda en la silla.

–Físicamente –contestó simplemente.

–Estoy más fea, lo sé –bromeó.

Katy sólo sonrió de labios y negó con la cabeza.

–Todo lo contrario. Ahora pareces más madura, más... –se quedó pensando un momento– Mujer... –Katy pasó a recargar sus brazos sobre la mesa.

–Han pasado años desde que no te veo, crecí, al igual que tú... –dijo Camila, bajando su mirada un poco.

Katy sonrió y suspiró un poco.

–¿Cuántas novias has tenido después de mí? –preguntó repentinamente. Los ojos de Camila se abrieron un poco en sorpresa.

–Tú y yo nunca tuvimos una relación... –dijo muy apenas.

–Tuvimos muchas... Muchas relaciones –Katy sonrió juguetonamente, mordiendo un poco su labio inferior.

Ahí estaba de nuevo, Katy coqueteando. Pensó.

–Sabes a que me refiero... –Camila dijo seria, sin encontrarse con la mirada de Katy.

–¡Vamos! Estoy bromeando, Camila –dijo divertida.

Camila volteó a ver a Katy rápidamente y volvió a bajar su mirada. Si Camila era tímida, tratándose de esa chica de cabello oscuro, lo era aún más.