04.

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En el capitulo anterior.

— ¡EL CHUPACABRAS! – Quiso correr pero tropezó cayendo y botando a Felix de paso – ¡Nos va a comer, nos va a comer! – Repitió – ¡Lix, corre! – agarro su mano para arrastrarlo si era necesario.

— ¿Tan grande y crees en el chupacabras? – El rubio lo miro incrédulo, pero luego de otro gruñido y algo peludo y siniestro asomándose a la luz, su percepción cambio. – Creo que daré beneficio a la duda y esta vez creeré en el chupacabras... ¡CORRE!

Luego de correr varias cuadras tomados de la mano con el animal persiguiéndolos mientras temían por sus vidas lograron perderle la pista

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Luego de correr varias cuadras tomados de la mano con el animal persiguiéndolos mientras temían por sus vidas lograron perderle la pista. Fue entonces que repararon en sus manos entrelazadas y se separaron como si el otro tuviera lepra además de distanciarse exageradamente mucho, el pecoso podía sentir la mirada de Hyunjin que pretendía ser amenazadora.

¿Chupacabras?, si ambos lo pensaban fríamente era una estupidez, pero dando que Hyunjin había estado viendo películas de terror bizarras la noche anterior y Felix cayó preso del pánico al ver a ese perro que más parecía un oso enfurecido que un perro, la respuesta más lógica fue eso... un chupacabras.

— ¿Por qué te haces el ofendido?, tú fuiste el que se puso a gritar como nena y me hizo caer al suelo. El rubio se giró encarando el rostro de mal humor que traía su acompañante para nada deseado – ¿Ahora te vas a quedar callado?

—Bueno... ese perro era gigante y tenía serias intenciones en atacarnos. — Se defendió — Además, ¿Por qué te tengo que dar explicaciones? Baboso.

—Estúpido. — Recalco Felix — No hay otra definición para ti, además de cabeza de tener cara de llama eres un tonto ¿Y sabes otra cosa? no quiero seguir hablando contigo.

—Entonces cállate.

Al fin había llegado a las afueras de sus casas, Felix cruzo a la vereda en donde estaba la de él, dejando a Hyunjin reclamando solo y refunfuñando no sabía cuántas cosas.

—Te estoy hablando, cara de muñeca. — tomo su brazo con fuerza girándolo tan fuerte que Felix se dobló un pie.

—Tarado, me dolió. — lo empujo luego de darle un puñetazo en el pecho. — Ya te dije no me toques y por ultimo ándate a tu casa cara de llama.

—Lo hare cuando se me pegue la gana y ahora no quiero irme y además deja de llamarme llama — se cruzó de brazos atravesando con su intensa mirada a Felix la cual no podía importarle menos al rubio, no estaba mínimamente interesado en esas miradas que pretendían ser asesinas. — ¿Qué harás si decido quedarme sentado en el ante jardín de tu casa toda la noche?

—Pensaría que estás demente y que es problema tuyo si quieres morir de hipotermia. — se giró cojeando por su pie adolorido y cerró la puerta de su casa, lo que hiciera Hyunjin el resto de la noche no era problema suyo.

Catarsis. - HyunLix.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora