Una Flama En Su Corazón

Quizás solo un quizás...

Las suelas de los zapatos de cierta pelirroja se escuchaban aquella mañana pasar por los pasillos y cualquiera que se metiera en su camino lo iba a llevar puesto. El pasillo no era tan largo hasta la llegada de la cubierta pero todos notaron eso.
El rostro de la pelirroja no lucia nada bien muy al contrario, esa expresión seria dio a entender a que no la molestaran, pero muy al contrario en silencio decidió subirse al mástil principal y al llegar a arriba vio a su alrededor con curiosidad

—¿Que encontraste Emma?—la voz de Yuugo resono siendo que todos los vean 

Los murmuros comenzaron a zona siendo que se quedaron en silencio hasta que solo vieron un rostro de asco por parte de Emma

—No es bueno... —aseguro el azabache con dilación al ver el rostro de la pelirroja

—Un barco abandonado — un tripulante alerto siendo que Yuugo lo viera y notara como había restos de tablas flotando en el océano.

La lentitud de movimiento del barco hizo ver como aquel barco estaba destrozado, varias de las cosas estaban flotando, pertenecías de alguien, y pocas cosas mas.

Emma bajo del mástil y solo negó con su cabeza —Dentro de poco encontraremos tierra. —Aseguro sin mas al ver al mayor quien de buenas a primeras acaricio la cabeza pelirroja —El fantasma va a tener que hacer un riesgo importante. Aun no llegamos a nuestras tierras, así que usalo como un barco de comercio. —ofrecio la chica al ver al océano —Es triste...  —comprometio al bajar su mirada y irse a la cocina

El trabajo había comenzado a ser mas visto, escondieron todo lo que estaba proclamado como un barco pirata y en pocas horas iban a llegar a tierra. Yuugo en un momento miró a un azabache quien de buenas a primeras había cruzado a su lado con un trozo de tela en su mano y ya teniendo una capa puesta en su espalda

—¿Donde crees que vas mocoso?— cuestiono Yuugo al agarrarlo del hombro

—Emma me encargo algo, no es tu asunto viejo. —hablo sin darle importancia.

Yuugo enmarco sus cejas, ese chico había tomado bastante confianza a los pocos días, solo faltaba que mande aun mas que él y se acababa.
Ray lo miro de reojo, viendo con al hombre se le marcaba la vena en su cuello al sonreirle, este lo ignoro y se dirigió donde estaba la pelirroja comiendo tranquilamente

—Llegue. —hablo el azabache al ser visto por ella

—Te ves bien —alego al verlo de arriba abajo su ropa ajustada al cuerpo era muy visto, una camisa blanca algo suelta, que dejaba notar su cuello blanquecino, junto con un estilo de collar que traía en su cuello, mientras que en su cintura traía un cinturón de cuero, el cual sostenía su pantalón marrón y un poco mas abajo traía sus botas de cuero que llegaban hasta sus rodillas.

—Tu igual. —alegó sin mas dilación, era cierto Emma traía la ropa de capitán ya que Yuugo le había otorgar el puesto al mando hasta llegar a tierra.

—¿Trajiste lo que pedí?— cuestionó al verlo con intriga siendo que él asienta

—Paula me lo dio. — se sentó alado de ella tomando una fruta

—No creo que es bueno comer eso, estuvo metido cerca de lo mas feo que hayas visto en este barco —

—¿Cerca de la basura?— cuestiono Ray al verla con eficacia pero esta solo sonrió con diversión

—Peor lugar. —aseguro al apartar su vista al ver como dos hombres comenzaban a pelear. —Un lugar que nunca creiste ver, si lo comes no me haré cargo si te enfermas — ella lo miro de reojo y este tan solo dejo nuevamente la fruta en donde estaba —Toma come.