Pequeñas confusiones

Capítulo Final

Luego de que fueron informados sobre Katy y el bebé, ya más tranquilos todos se dirigieron a la sala de recién nacidos para conocer al nuevo integrante de la familia.

A través del gran cristal que los dividía, pudieron ver al pequeño jugando con sus manitos mientras pataleaba al aire.

Y: ¡Wow, desde ya se nota que será muy inquieto!

La: Puedo verle algunos pocos cabellos rubios ¿ustedes también lo ven?

O: Me recuerda a Dima cuando nació

L: Sin duda nos dará muchas alegrías de aquí en adelante…

A: Sí se llega a parecer a Yulia, también nos dará muchos dolores de cabeza

V: A mi se me hace y es que se nota que será muy consentido por sus tías…

Luego de un rato, Andy y Valeria se retiraron y prometieron volver al día siguiente para visitar a Katy cuando despertase.

Oleg y Larissa también tuvieron que retirarse y sólo quedaron Lena y Yulia.

Cuando trasladaron a Katy a una habitación individual, Lena pudo pasar solo unos minutos para verla pues aún no despertaba.

Al día siguiente, a primera hora ya estaban allí nuevamente. Esta vez al entrar a la habitación, Lena pudo ver a su hermana sentada en la cama con el bebé en brazos, recién dormido.

K: ¡Chicas! Pensé que vendrían más tarde

L: ¡Vaya susto que nos diste ayer Kei Kei! Me alegra tanto verte despierta ¿te sientes bien?

Y: Hola Katy, ya sabes como es tu hermana, insistió en venir lo más pronto posible y eso que ayer nos fuimos tarde a casa y casi no durmió

K: Sí Lena, me siento bien solo un poco cansada. Me alegra que estén aquí, me imagino que los demás no tardan en llegar…

Y: Todos están ansiosos por verte Katy y también para conocer de cerca al bebé

L: ¿Has pensado en algún nombre ya?

K: De hecho si, quiero que se llame como su papá y que lleve su apellido… Dimitri Volkov

Y: Estoy segura que eso pondrá muy felices a mis padres, gracias Katy…

En el transcurso de la mañana, los padres de Yulia, Andy y Valeria fueron a visitar a Katy al hospital, estaban fascinados con el pequeño Dima y el ambiente entre ellos era de alegría y paz.

Al día siguiente, luego de que los médicos constataran que Katy y el bebé estaban perfectamente bien, les dieron el alta y pudieron regresar al departamento junto con Lena y Yulia.

Los primeros días con el bebé en el departamento fueron de caos absoluto, al principio ninguna de las tres chicas sabía exactamente lo que tenían que hacer, aún así se turnaban y se ayudaban entre todas para atender al pequeño Dima.

Las noches de desvelos e insomnio se les notaba en los rostros a las chicas, tenían que lidiar con la universidad, sus trabajos de medio tiempo y encima de todo el acoso de la prensa.

Algunos medios de comunicación se habían enterado del nacimiento del nieto “ilegítimo” del gran empresario Sergey Katin, querían al menos alguna declaración de cualquiera de sus hijas e incluso habían descubierto la dirección del departamento de Yulia.

Él escándalo de que ambas hermanas habían abandonado su casa, destruyendo así la imagen de “familia perfecta” que siempre presumían Inessa y Sergey, empezó a pasarle factura al empresario dándole mala fama entre sus colegas afectando su imagen de “hombre correcto e intachable” y a Inessa de “madre ejemplar”.