Bell Cranel: El Último Héroe de la Nueva Era

Arco I: Capítulo 19 - Hasta Estar Seguros

Mientras el grupo de Bell tenía como objetivo ir al Piso 18 teniendo esperanzas para reencontrarse con Jeanne y la <Familia Loki>. El Dios Hermes iba con destino a la Torre de Babel para reunirse con una vieja conocida.

Una cierta Diosa apartó la mirada de todo mientras dirigía su mirada hacia la puerta. Sus zapatos golpeaban el piso en donde caminaba. Ella echó su cabello plateado sobre atrás sus hombros al mismo tiempo.

Freya: ¿Te hice esperar mucho?

Ella fue la primera en saludar después de pasar por el largo pasillo al entrar en la nueva habitación, estaba adornada con costosas estanterías llenas de caros y lujosos ítems.

Su dependiente favorito, Ottar, y otro Dios con una de sus pendientes estaba allí.

Hermes: No, en absoluto. Lo siento por tomar tu valioso tiempo, Freya-sama.

El Dios estaba sentado en una mesa algo extraña que se parecía a una manzana. Asfi a su lado, no podía ocultar su nerviosismo.

Freya los miro a ambos antes de tomar asiento junto al estoico Ottar a su lado. Cada uno de los movimientos de la Diosa eran cautivadores, su vestido negro que revelaba la mayoría de su cuerpo se deslizaba atraves de la silla. La silla chirrio ligeramente cuando se inclinó hacia atrás.

Asfi sin dudas fue cautivada por ella y se sonrojó tanto hasta el punto de desviar la mirada. En cambio, Hermes solo pudo sonreir encantadoramente.

Ambos Dioses se sentaron en sus respectivos lugares con cada dependiente atrás de ellos.

Freya: ¿Entonces que sucede, Hermes? - preguntó para ir directamente al grano.
Hermes: Como estoy más que seguro que eres consciente, estas interesada en la mayoría de la <Familia Vesta> y especialmente en Bell Cranel.
Freya: ¿Y...?
Hermes: Vine a hacerte una petición.
Freya: Entonces... ¿Por eso te molestaste en venir a mí?

La expresión de ella no cambio en absoluto. Ambos Dioses seguían intercambiando grandes sonrisas.

Hermes: Llegaste a protegerlo, Freya-sama. En la última reunión no paraste de mirar su expediente y hablar cuando se tocó su nombre.
Freya: ¡...!
Hermes: Él es alguien digno de la atención de alguien tan hermosa como tú. Así que no puedo evitar estar interesado por esto.

En la última reunión de Dioses, Freya estuvo constantemente interesada en él, cuando se toco su nombre no paro de mirar o tratar de sacar alguna información más, Hermes lo notó muy bien.

Hermes: Freya-sama estoy realmente loco por ti. Pero aun así, pero no soy lo suficientemente tonto para no notarlo. En otras palabras, había estado actuando...
Freya: Bien jugado... - susurró ella.
Hermes: Estas investigando de manera diferente, pero dudo que alguien más lo haya investigado.

El estilo de reclutamiento de Freya era muy bien conocido. Si encontraba alguien interesante, actuaba para tenerlo. Hermes intuía que si Freya estaba interesada en Bell, no estaría perdiendo el tiempo en solo buscar información.

Freya: Está bien, entonces.

Dijo resignada ya que era inútil tratar de ocultarlo.

Hermes: No tengo intenciones de jugar con tu juguete. Solo quiero ver con mis propios ojos lo que él es capaz de hacer, lo que está destinado a ser - dijo seriamente mientras explicaba.

Después en un abrir y cerrar de ojos sus ojos cambiaron a un mendigo en la calle.

Hermes: -con ojos llorosos- ¡Así que por favor, por favor no le hagas nada a mi Familia, Freya-sama!
Freya: ¿...? - ella se sorprendió por su petición, después permaneció en silencio unos momentos antes de volver a hablar.