Capítulo 3: ¿Mateo me habla?

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- No tengas miedo no como personas.

- ¿De verdad? ¿qué me dices de las chicas que te tiras, acaso no cuentan? Además no te tengo miedo.

- Eso me gusta de todas maneras, nos conocemos desde hace 3 años.

- No me digas, ¿Entonces por qué actúas como si fuera lo contrario?

- JAJAJAJAJAJA sigues siendo tan tierna como antes Marry, es una pena que no puedo tenerte amarrada y haciéndote mía.

- No estoy interesada, GRACIAS.

- Por ahora querida, ya veremos si te rehúsas a ser mía.

- Mejor busca un bosque y piérdete, déjame en paz

- No puedo, si me pierdo tú serás la que pagarás caro.

- No me asustas, y por favor DÉJAME EN PAZ.

Me tomó del brazo, me acorraló a mi taquilla, puso sus manos cada uno al lado de mi cabeza, se sentía nuestra respiración, me miró a los ojos, y para ser sincera se veía tan guapo, su mirada era tan profunda, se acercó a mi oído y con su dulce voz me dijo:

- Yo soy tú y me mido antes de hablar Marry, además sé de tu secreto y estoy bastante seguro de que no quieres que todo el instituto lo sepa, ¿Te lo imaginas? sería muy humillante y estoy seguro de que, si llega a oídos del director, tu reputación se vería arruinada y no podrás cumplir tu sueño.

Estaba embobada con su voz, traté de permanecer fuerte, pero fue inútil, estaba casi a punto de caer hasta que me preguntó:

- Entonces, ¿Qué te pondrás para la excursión?

Esa pregunta me llenó de tanta ira que simplemente no me pude contener y le di una bofetada en la cara.

- Mejor pregúntale a una de tus amantes de fin de semana, y lo que me vaya a poner no es tu maldito problema.

Dicho esto, me fui tan rápido como pude, sentía que el corazón se me iba a salir por la boca, es tan sexy, pero no era mi objetivo, ahora tenía que llegar a casa para hacer un listado de lo que necesitaba para la excursión.

Ya te diste cuenta de que soy una completa nerd que hace una lista de cualquier cosa, a eso yo le llamo organización, pero nadie lo entiende.

¿Recuerdas al director? nos avisó el día de la excursión que sería el 25 de noviembre, - ¡Perfecto! - pensé, aún me dará tiempo para entregar todas mis tareas y poder disfrutar del paseo sin preocupación alguna, no me gusta dejar las cosas para última hora.

Al sonar el timbre de irnos a casa, estaba muy emocionada de contarle a mis padres de este fabuloso paseo que desde que llegué comencé a limpiar y ordenar la casa, que ahora me pregunto ¿Cómo puede hacer tantas cosas en tan poco tiempo? En fin, cuando llegaron mis padres se quedaron sin palabras al ver la casa tan ordenada, de inmediato dijeron: -Marry, dinos lo que quieres-, ni un "hola" o "wow pasó un tornado" ¡NADA DE ESO!, me sentí ofendida pero bueno no es para tanto.

Al llegar la hora de la cena les comenté a mis padres sobre este paseo escolar, a lo que obviamente dijeron que sí, claro, después de ver la casa impecable no podían simplemente decir que no (vieja confiable).

Lo único malo es que la salida era casi en la madrugada, ni una persona en su sano juicio hace eso, imagina esta escena:

- Día del paseo jueves 25 de noviembre.

- Lunes 22- 2 exámenes

- Martes 23- presentación

- Miércoles 24- pasantía (la cual para el colmo salí a las 7 pm)

Sólo es un juego ¿Verdad?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora