Capítulo 10: Desastre a la vista

9 1 2
                                    


- No sabía que sabías cocinar

- Tengo mis secretos mi lady

- Quiero conocerlos todos

- Bueno pues ahí te va uno, lo que hicimos en tu cuarto no fue sexo

- ¿Qué? Pero leí lo que hicimos y si e...

- Marry yo no tuve sexo contigo, te hice el amor, eres la primera chica con la que lo hice, si hubiera sido sexo no te beso, ni te abrazo, y mucho menos te trato con delicadeza, no quería hacerte daño. Era tu primera vez, decidiste quitarte la virginidad conmigo, ese honor nadie me lo había dado solo tú, así que hice lo mejor que pude para no lastimarte

- Yo...yo...no sé qué decir

- Marry- me tomó de la mano- aún es muy pronto para esto, pero en verdad, pero quiero formalizar lo nuestro, ya no quiero hacer tú amigo con derechos, sé que aún no quieres nada serio por lo que te hicieron en el pasado, tal vez no creas en mí, es muy pronto lo sé, pero Marry en verdad, te amo me haces sentir como nadie, me siento especial a tu lado, no me importa el peligro, tú eres quién me hace soñar y mi corazón palpitar, ando loco por ti Marry

- No lo entiendo, primero me forzas a hacer esto y de repente quieres formalizarlo, que estás pensando, no quiero una relación seria eso no es lo mío, y recuerda que el trato era sin sentimientos y si eso llegara a pasar esto tenía que terminar de una vez, lo peor es que no quiero terminar.

- Marry déjame amarte, dame la oportunidad sé que fui un tonto, pero he cambiado por ti.

- Mateo yo...

- Te prometo que nadie sabrá sobre lo nuestro, actuaremos como amigos con derechos hago lo que sea, pero por favor acéptame.

- Lo pensaré

Entonces a ver si entendí Mateo me folló 2 veces y ¿Ya quiere algo serio? este tipo debe estar loco sin dudas, yo no quiero nada serio del mismo modo que me hicieron, pero me ha demostrado que en realidad me quiere, estoy jodida lo sé no tengo idea de que hacer ahora.

Mateo me dejó en casa, antes de bajar del auto me dio un beso, no respondí solo bajé y entré a mi casa, subí de inmediato a mi habitación y vi lo más hermoso que mis ojos hayan podido ver, una caja enorme de bombones y un pastel de mi tienda favorita, pensé que habrá sido Mateo, lo llamé para agradecerle el detalle, pero me dijo que no habría sido él, hice un mapa mental sobre quién pudo haberme enviado ese regalo y cómo diablos tenía la llave de mi casa, me asusté por unos momentos pensando en las posibilidades de quién sería, pero no tuve que pensar tanto, cuando tomé los bombones vi una nota que decía:

Dulce Marry, espero que disfrutes este regalo, sé que amas las cosas dulces así que decidí hacer algo por ti, me ayudaste cuando nadie lo hacía, aun siento que estoy en deuda contigo, que tal si te invito a salir esta tarde paso por ti a las 7:00pm -att: Enrique

¿Enrique? quien era ese tal Enrique que no recuerdo, ¡bah! mejor disfruto mis dulces y luego pienso en ello. Al otro día fui al instituto y alguien que no había visto me saludo con mucho cariño, era muy claro eran Jack y Enmanuel.

- Has estado muy perdida Marry

- Sí ¿Dónde has estado?

- Calma chicos estoy bien solo salí un poco para alejarme de la ciudad

- Oye nos enteramos de que Enrique te invitó a salir ¿Es cierto?

- ¿Cómo lo supieron?

Sólo es un juego ¿Verdad?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora