Fix You [Jimin Y Tn] -TERMINADA-

23.

-¿entonces vienes luego?, ¿seguro?-- lo mire 

-mjhm... tengo que cambiarme, no puedo ir así-- se señalo

-esta bien, aunque debo decir que el uniforme te queda muy bien-- levante mi pulgar 

él miro a otro lugar con sus mejillas teñiendose de un color rosita, muy tierno. termino su agua y me miro.

-ve a casa, me mandas la dirección y yo estaré ahí puntual, lo prometo-- me miro a los ojos

-sabes bien que no me preocupa eso...-- entrecerré mis ojos 

-mi padre ya debe estar en el tercer sueño, tú tranquila-- asintió

es estúpido, ¿por qué no estaba en la cárcel?, Jimin me contó todo lo que dijo, incluso sobre su madre, ¿Qué estaba esperando?, ¿Qué le hiciera más daño?. 

sentía mucha rabia, no era justo... aunque, ¿Qué en esta vida es justo?, exacto, nada.

me despedí de él sin mas que nada que pudiera hacer, solo esperar a que Jimin hiciera algo y cuando lo haga, sabré que él podrá salir por completo de aquel hoyo. me fui a mi casa montando a asher y una vez llegue le dije a mi madre que Jimin llegaría en dos horas más, cabe decir que se alegro mucho.

me di una ducha y me vestí con unos jeans azules y una polera negra de mangas cortas, mi cabello lo deje suelto y termine por agregar un poco de maquillaje, no exagerado, solo sombra por de ojos, mascara de pestañas y un delineado pequeño, terminando por un brillo labial rojito.

una vez lista baje ayudar a mamá, papá no llegaría hasta dos horas más junto con Jimin, así que era nuestro momento a solas. 

-¿Como te ha ido en la escuela, hija?-- me pregunto mientras revolvía lo que había en la sartén 

-bien, no ha pasado nada malo con mis notas-- le dije tranquila

-que bueno, realmente estoy muy feliz, ya te ves mucho mejor que hace semanas atrás, y la psicóloga no me ha llamado, tampoco el colegio-- me sonrió tranquila

-tss, te dije que no tenía nada, solo era rebeldía-- le dije con una pequeña sonrisa  

-aún así hija, si necesitas hablar, sabes que cuentas conmigo-- me miro 

-lo sé-- asentí 

pero no quiero que te molestes conmigo, ni me castigues, ni que sientas asco de mi...

observe aquel mesón, que por ser muy buena madera aun no lo cambiábamos, aunque lo intente. apreté mi manos ignorando lo que estaba haciendo mientras recordaba, siempre me pasaba sea donde sea que yo mirara, siempre iba a recordar algo en esta casa...  

-auch...-- me queje llevando mi mirada a mi mano pero la evite enseguida

-Tn-- me dijo mi madre acercándose 

-se me olvido lo que estaba haciendo-- reí sin ver 

-ay... ven aquí-- me dijo mientras negaba 

-no fue grande, tranquila-- le dije en calma 

-¿como es que no puedes ver la sangre?, cuando eras pequeña me decías que querías ser doctora-- me dijo mientras limpiaba mi pequeña herida 

-las cosas cambian, mamá-- reí leve 

la verdad, ese era mi sueño, pero lo deje de lado cuando tuve aquel trauma con la sangre al punto de casi desmayarme al verla... aunque quisiera, no podría estudiar eso sin sentir nauseas o que el estado e pánico me invada por completo.