"¿Por qué me haces esto? ¿Por qué eres así conmigo?"
En donde al parecer Min Yoongi no se rendirá tan fácilmente en conseguir su objetivo: ser correspondido por Park Jimin.
Donde no sabe cuanto es suficiente para su delicado corazón, un gran error...
Ya habían pasado dos años desde que Park Jimin y Min Yoongi empezaron a salir. Desde que sus corazones se juntaron para no doler más, cuando ambos pudieron estar felices juntos.
Sus vidas eran diferentes ahora que Jimin había salido de la universidad y Yoongi aún estaba en último año. Ambos decididos con sus carreras y alistando su vida para lo que les espera juntos.
Yoongi quería ser un compositor de música, uno que fuera exitoso y bueno en lo que hace, y por otro lado su novio, quería ser el que cantara las canciones que el hiciera.
Pero como aún estaban desarrollando todo eso, Jimin trabaja en un bar cerca de su departamento. Solo era un trabajo para poder tener fondos por un tiempo antes de ejecutar sus verdaderos sueños.
Pero en este momento la pareja no podía disfrutar más su tiempo juntos. En el cual compartían caricias y dulces besos entre sí. Yoongi sentado a horcajadas en el regazo del más alto, recostando su delicada cabeza en el hombro de este.
Disfrutando las pequeñas caricias en su espalda, y como Jimin delicadamente jugaba con su cabello de la nuca. Era algo que amaban, estar juntos. Solo con poder pasar tiempo juntos sentían que sus vidas se acompletaban, eran todo lo que necesitaban.
Se tenían uno al otro, en las malas y en las buenas. Compartían cada cosa, reían y lloraban juntos. Todas esas emociones lo significan todo para ellos.
Jimin besaba lentamente las lindas mejillas de su novio, mientras que sus manos subían y bajaban acariciando las finas caderas del pálido. Aquellas caderas que lo volvían loco, tan lindas y suaves.
Sus labios rosados, su piel lechosa, sus oscuros cabellos tapando un poco de su frente, su delgado cuerpo y aquellos ojos cristalinos. Tenía tanto poder a su merced y eso le encantaba, le encantaba tener a Yoongi para el y solo para el.
-Aun no puedo creer que seas todo mío Min Yoongi.
-Aun no puedo creer que tu, Park Jimin, terminaras así con el chico del que según tu, nunca te enamorarías.
-Ey, no me recuerdes esos tiempos. Tenía la mente nublada. -se apego más al pelinegro para abrazar su cintura- No se como pude rechazarte tan solo una vez.
-Ya, ya, mejor miramos ahora, tu y yo, juntos, y espero que para siempre.
Yoongi levantó su cabeza, para empezar a esparcir pequeños besos sobre todo el rostro del mayor. Se sentía feliz por tenerlo, y más como se sentía por tenerlo con el, y solo con el.
-Te diría que durmiéramos por ser el adulto responsable pero en realidad solo quiero quedarme así. Junto a ti.
-Basta, no hagas que me sonroje.
Jimin rio en bajo, totalmente enamorado del chico de tez blanca. Quien de repente se bajo de su regazo, confundiendo un poco al rubio.
-Oh, no me mires asi Jiminie, mañana tengo escuela y tú iras a desayunar con Namjoon y Jungkook.
-Les puedo decir que cancelen y tu puedes faltar mañana. Vamos Gigi~
-No te comportes así conmigo, sabes muy bien que no me gusta decirte que no. -suspiro para luego acercarse al rubio y darle un beso en su mejilla izquierda- Recuerda que el viernes no tengo clases y ya tendré unas vacaciones, podremos estar juntos cuanto quieras pero ahora hay que dormir. ¿Si, mi amor?
Jimin solo asintió, quería seguir alegando pero era cierto. Solo unos días más y tendría a Yoongi por más de dos semanas para el solito. Era perfecto. Les avisaría a Taehyung, Jin y Hoseok que ni se les ocurriera planear nada, el quería pasar mucho tiempo con su novio.
El mayor se acosto en la cama, por fin rendido por la petición de Yoongi, decidió hacerle caso. Sintió un pequeño peso en su pecho, y para cuando volteó sonrió, no podía estar más feliz cuando estaba con el.
-Hay que dormir Jiminie. -se acomodó bien en este, reposando su cabeza en su pecho y sus piernas encima de el torso del mayor.
-Pareces un lindo koala Yoonie.
Rio, totalmente hipnotizado por sus acciones, por su forma de ser, su cariño, su amor, todo de el lo tenia así. Y no podía amar más eso. No podía amarlo más a él.
Volvió a reír cuando sintió un leve golpe en su torso, apreciando la linda cara sonrojada de Yoongi, quien se tapaba la cara con la cobija. Jimin pudo escuchar un pequeño susurro del parte del menor, "Basta Jiminie, me avergüenzas". Ambos rieron suavemente por esto.
-Yoonie, mi amorcito, mi pedazito de azúcar, mi universo, mi gatito meloso, mi...
-¿Cuantos mas hay? -este rio un poco y volteó a ver a su hombre- Continua.
Dijo, con su linda sonrisa de gomita.
-Te amo, te amo más de lo que te puedes imaginar.
-Yo te amo más a ti Jiminie, mucho más.
-Ni lo pienses, yo más. -mostró su ceño fruncido, tratando de no reírse- Tal vez no pueda bajarte la luna literalmente pero puedo bajarte los bóxers.
-No, no y no... -el menor se levantó para apagar la lámpara de al lado- Ya hay que dormir. Buenas noches, te amo.
Finalizó para acomodarse de nuevo en el firme pecho de Jimin, quien no paraba de reír, tratando de no hacerlo tan fuerte por el "gatito" recostado en el. Susurro un "Yo a ti" para dormir complacido, sabiendo que tiene a Yoongi a su lado y Yoongi sabiendo que tiene a Jimin a su lado.
Solo ellos dos, en su propio universo. Siendo más felices que nunca juntos. Porque ambos se aman y nunca pararan de mostrarlo.
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