Una nueva oportunidad para Sovieshu.

Reconciliación (2)

Rastha y Navier se miraron a los ojos durante breves segundos y aquella vez por primera vez Rastha logro ver algo de aprecio en su mirada.

Cuando aún era una esclava veía en el cuarto de Rebetti fotos de la Emperatriz Navier, soñaba con conocerla, ella era la persona que Rebetti, la chica que tenía todo lo que Rastha quería, admiraba.
Soñaba que ella la podría rescatar de aquel sufrimiento y llevarla a un paraíso a su lado.

..!

R🌸 (aquellos días los sufría mucho.. pero, que pasa con los que aún sufren por lo mismo?!)

Ena finca del visconde Roteshu ella no era la única esclava, había muchos, muchos sufriendo incluso cuando no cometieron pecados, eran víctimas que heradaban la culpa de sus padres, al igual que ella, se convirtió en esclava después que su padre la vendiera para salvarse a si mismo.

La mirada de Rastha se puso sombría al pensar en esto, pero una leve sonrisa asomo de su boca después de pensar en algo.

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N👑
Después que la fiesta se té se calmo me retire con mi hermano, la habitación estaba llena de regalos, Koshar se había emocionado al llegar a ver a Navier.
Sin embargo luego de ver lo ocurrido aquella tarde quería preguntarle el porque, pero Navier solo contesto que no importaba, pues ya todo está volviendo a ser como antes, además sino actuaba de la manera correcta correrían rumores y dañarían su reputación.

En el fondo Navier sabía lo cruel que era el mundo social, en especial los nobles con Rastha ahora que ya no era amante del Emperador, así que por eso no veía mal la actitud de Rastha aquella tarde. Su actitud cambio después de dejar el palacio y ahora era un poco más sensata al hablar, y sobre todo la trataba con respeto antes los demás.

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Cuando Rastha llegó a su casa, se sentó en un cómodo sofá y pedio algunos libros sobre las leyes de los esclavos, aunque todavía le costaba leer quería aprender lo más posible antes que nazca su bebé.

Su idea era que, al ser su hijo también hijo del Emperador, podría cambiar algún día las leyes, no deseaba que más personas parecieran lo que ella.

Paso unas dos horas cuando por fin acabo con algunas hojas que hablaban sobre estás leyes, las leyó un par de veces para intentar comprenderlas.

Era de noche y apenas podía estar despierta, así que fue a su habitación, se cambió a una ropa cómoda para dormir, cuando de repente sintió un leve movimiento en su interior, era su bebé, pasó su mano por su vientre y lo notaba algo grande ya.

Recordó lo duro que fue su anterior embarazo, como tenía que trabajar incluso en ese estado. El dolor de esos tiempos aún estaban es su mente.

No podía olvidar nada, recordaba como lloro cuando le dijeron que su hijo murió. Ahora aunque lo tiene cerca es incapaz de poder mirarlo a los ojos, pues recuerda cada minuto de su vida donde sufría.

En estás 3 semanas que estaba en la pequeña mansión, su maestra le enseñaba muchas cosas y ella iba aprendiendo, una de las primeras cosas que le enseño fue que ella no tenía culpa de ser esclava y nadie debía hacerla menos por eso

"los hijos no deben cargar con la culpa de los padres"

Eso le dijo, al ver a su hijo, Ian (Ahn según algunas traducciones**) ella comprendió que el no era el culpable de lo que pasó, así que lo iba a visitar cada noche antes de dormir, lo veía de lejos, intentado acercarse cada día un poco más, ayer avanzo hasta su cuna pero cuando estiró su mano para acariciarlo, vio su gran parecido y temía que sufriera lo mismo que ella en el pasado, así que se alejo despacio y lloro hasta dormirse.

Esta noche quería volver y decirle que lo protegería para que no sufra nunca, su futuro hermano lo va a proteger, y ella se encargará que nadie lo lastime.

La única salida de su dolor era ahora sus hijos.

La Emperatriz la había defendido esa tarde, si ella era capaz de reconocerla como persona al preocuparse, los demás también deberían hacerlo.

Estaba decidida a cambiar su destino y disfrutar de la vida.