VCARD <<Taekook>>

05: La Lujuria Mata

—¡Pelea! ¡Pelea! ¡Pelea!— los gritos de los estudiantes juntándose en círculo hizo que todos alrededor se voltearan a echar un vistazo a lo que sucedía en medio de ellos.

Nadie se había esperado que una persona tan delicada y hermosa como Taehyung tuviera la nariz empapada de sangre, menos que este tuviera agarrado a Yoongi de su camiseta para golpear aquel estúpido rostro sonriente que tanto odiaba. Ese fue el día en donde por primera vez dejó que su instinto se saliera de control, que Jimin no tuviera influencia sobre sus actos y que todos le vieran en acción.

Todo comenzó en la mañana, Taehyung se había levantado con un leve problema entre sus piernas. Su dragón estaba despierto antes que él, molestandolo mientras recurría a hacer pipi sin que se saliera de sus coordenadas. Su madre no estaba en casa, como de costumbre, así que él mismo se preparó su desayuno y preparó la limosina minutos antes de salir.

Con la compañía de Jimin y su clásico pedazo de chocolate en boca, pudieron buscar a Hoseok y los tres asistieron a su escuela como de costumbre. No sabía el porqué, pero para Tae el día se sentía apagado. Le emocionaba poder ver a Kook aunque fuera de lejos, pero algo le estaba molestando, una espina en su nuca, algo, alguien le estaba dando vibras pesadas y Jimin sabía quien.

Ese tal Yoongi, desde que Jimin le vió supo que ese chico olía a problemas, decirle a Taehyung no fue de ayuda, pero espiar a ese intruso se le hizo casi imposible. Mientras Taehyung tomaba clase, Jimin se encargó de no quitarle el ojo de encima a Yoongi. Miró cada acto, cada suspiro aburrido y mirada que le brindaba a su cliente. Al final, Jimin sintió miedo. ¿Sería posible que Yoongi...? ¡No! ¡Que tontería! No podía a ver una posibilidad de que Jimin tuviera un encuentro con otra hada hormonal y que casualmente fuera la de Yoongi. Taehyung es el único virgen, estaba en un campo solo y la energía sexual era sola suya.

Ya en el almuerzo fue cuando todo se había complicado.

—¿Porque ya no almorzamos juntos?— el puchero de Hoseok hizo que Tae sintiera algo de ansiedad cuando se trataba de sus caprichos.

—He estado ocupado con algunos asuntos y-y también me metí en un club por accidente.— la respuesta de su cliente hizo que Jimin le enseñará un dedo arriba a Taehyung, se sentía orgulloso por como evitaba hablar sobre el asunto de Kook. No sabía como explicarle a su mejor amigo las ganas que le traía a ese culo perfecto de aquel chico.

—Pero no es justo, me la paso solo y sólo te veo cuando me buscar y llevas a casa.— ambos se dirigían hacia la cafeteria mientras los demás solo daban miradas leves a el gran dúo de la escuela.

—Te digo que, almorzamos hoy, no tienes que pagar nada, esta vez yo invito. No puedo dejar que mi alma gemela se quede sola, después de todo.— Taehyung, apesar de estar sintiendo muchas emociones mixtas en su cuerpo por los siguientes días, aún tenía ese lado cariñoso que sólo Hoseok se había ganado.

—¡Genial! ¡Comeremos comida italiana! Escuché por ahí que es el plato especial del día y si le guiñas el ojito a algún empleado, tal vez podríamos comer el doble.— aplaudió contento, Tae sólo pudo reír sonrojado ante el comentario de Hobi.

Ambos chicos se detuvieron cuando vieron a lo lejos del pasillo a dos personas conocidas hablando armoniosamente. Tae y Hobi no podían creer lo que sus ojos veían, para Jimin sólo fue un momento de alerta. Pues el mismo Min Yoongi se había encontrado con Jungkook y parecían estar teniendo una buena platica.

     Taehyung sintió sus ojeras calientes mientras que Hoseok escuchó como su corazón se había roto nuevamente por la misma persona. Ver a Yoongi hablar tan abiertamente con un chico que no fuera él le hizo sentir mareado. Taehyung notó que Hobi no se sintió bien, tomó suavemente del hombro del contrario y le calmó con sólo un susurro.