Crush Culture┃JiKook AU!

11. Un buen amigo.

JungKook juraba que se iba a volver loco pronto, sumándole que TaeHyung no se demoraría nada en descolocar su brazo derecho de tanto que lo había sacudido en los últimos cuatro minutos. Llevaba así desde que llegaron a la biblioteca, su nerviosismo siendo tan notable por el hecho de que se encontraría con su querido crush.

Él de verdad que intentaba entenderlo pero no podía hacerlo, no entendía como un 'amor platónico' era capaz de afectarte de esa manera.

Y ni siquiera tenían a JiMin de frente, quien por cierto leía un libro tranquilo en una de las tantas mesas ocupadas a la vista, TaeHyung lo detuvo detrás de una estantería justo antes de entrar al espacio de lectura. Tenía sus labios ya rojizos de tanto morderlos y se seguía sosteniendo de la manga de su buzo justo como un pequeño crío.

—¿Qué hacemos aquí? Deberíamos ir donde Park. —dijo JungKook, frunciendo el ceño y cuando trató de girar la cabeza para mirar al susodicho, Kim lo agarró de las mejillas impidiendo que lo hiciera.

—No mires. —Su tono de voz trató de ser firme pero un pequeño desnivel delató su alteración, él solo lo miró con una ceja alzada—. Perdón, es que estoy un poco nervioso... Dame cinco segundos.

—Aún no me acostumbro a verte así cuando normalmente eres un tipo de mariposa social, Tae.

Y no mentía, TaeHyung en su ámbito normal era muy bueno para socializar y acercarse a los demás. Sin embargo, ahora parecía tan inseguro al respecto de simplemente estar en el mismo lugar que ese chico. ¿En serio le gustaba tanto? ¿Qué era lo que veía en él en verdad?

—Es que cuando se trata de él es tan diferente, ¿Sabes? —mordió su labio inferior, dejando caer sus manos a los costados de su cuerpo inquieto. Su mirada saltando a otro lugar—. Solo no quiero arruinar las cosas, JungKookie.

—Wow, entiendo.

No sabía ni que decir cuando se sinceraba de esa manera tan... vulnerable, ver a su mejor amigo así por un chico era fascinante. En el pasado tuvo otros crushes pero nunca nadie logró afectar tanto como Park JiMin, ese chico de biblioteca que al parecer tenía todo lo que Kim quería en ese momento. Una punzada de empatía cruzó por su pecho al ser consciente de la gravedad en los sentimientos de TaeHyung, unos que bien podrían ser correspondidos o no.

Pero por ahora era mejor no pensar en los desenlaces desafortunados, debía de ser positivo con el tema para que este arranque de valentía que le había dado no fuera en vano y además hiciera valer esta oportunidad que había conseguido para él.

—Pero escúchame bien, tigre. Tú eres alguien increíble, eres capaz de todo y esto no te detendrá, ¡Vamos, es solo un chico! —JungKook lo tomó de los hombros, hablándole en un tono seguro pero sin llegar a gritar porque aún seguían dentro de la biblioteca y estaba prohibido.

Kim hizo una mueca, mientras su rostro obtenía un rosado leve.

—No es cualquier chico... es él.

Maldijo por dentro ante eso. Estaba tan perdido.

—Lo que sea pero serás capaz de ir donde Park para entablar una conversación, yo te acompañaré así que no estés tan nervioso. —Una sonrisa curvó sus labios cuando vio a su amigo relajar notablemente la tensión en sus hombros y respirar más pausado—. Eso es, ahora vamos.

Lo tomó de la mano para salir de aquel pasillo de libros y caminar en dirección al chico que era su objetivo, sorprendiéndose cuando notó la mesa vacía en un primer vistazo pero respiró en alivio cuando lo observó regresar con un libro en la mano justo en el instante en que ambos se detuvieron enfrente de él. JiMin dirigió la mirada hacia ellos, y JungKook juró ver una pequeña mueca en sus labios al reconocerlos.