Falling in love || Jeon Jungkook & Tú ||

Tradición Dubois

Marzo, 1983.

Que rapido había pasado el tiempo.

Ya ambos enamorados tenían 23 años, lo que significaba que no tardarían en hacer el baile para esposar a la menor, Amelie Dubois. Quien estaba en el avion ante la insistencia de sus padres.

Ella solo quería volver a ver a Jungkook, ¿que habrá sido de su vida? ¿Está bien?

Esas preguntas solo rondaban por su cabeza.

Mientras Jungkook daba vueltas por la sala de su casa, de su gran casa.

- ¿Me reconocerá? ¿Qué hago? ¿Qué le diré? .-entraba en pánico.

- Hijo mío .-habló Park Ji Young-. deja de mortificarte con esas preguntas y busca algo decente para vestir, mañana es el baile.

- Padre, déjeme respirar, por favor. Pasaron 6 años .-recalcó-. y no sé que decirle. Seguro estará más hermosa .-sonrió tontamente.

Ji Young suspiró riendo, pasaron años y aún así seguís flechado por aquella chica.

- Después pensaremos en eso, ve a buscar algo.

Jungkook asintió y se dirigió a su habitación.

Marzo, siguiente día, 1983.

- Sonríe bien, parece una mala mueca .-se quejó la señora Kim susurrándole al oído a su hija menor, Amelie Dubois.

- Hago el esfuerzo, sabes que no quiero estar aquí.- susurró sin ganas.

- No quieres pero debes. Hay que proseguir con la dinastía Kim.

- Tu y tu tonta dinastía .-rodó sus ojos cruzándose de brazos.

- ¿Qué quieres decir?

- No hace falta que te recuerde cuando eras una trabajadora de un mercado cuando conociste a papá, hipócrita. .-confesó la menor, haciendo tensar a la mayor-. Lee Yena, la que tiene una adicción con tener sangres puras en la dinastía Dubois, resulta ser una ex trabajadora de mercado y primogénita de agricultores, es un buen titulo para el periódico.

- Ni siquiera te atrevas .-amenazó.

- Entonces, yo decidiré con quien me casaré, y tu no tendrás poder sobre eso. Dile adiós a las sangres puras, madre.

Amelie se paró firmemente y sonrió, sabiendo que ganó la batalla con su madre.

Pasaron 5 chicos de altas dinastías, incluyendo sus amigos, a quienes solo saludó con abrazo y un beso, no quería casarse con ellos.

Desvió la mirada y miró a sus amigos, quienes le saludaban y le hacían señas para que vaya con ellos, pero tenía que esperar a otras familias.

- Buenas noches, familia Dubois. Un gusto poder estar en este baile importante .-habló un señor, Amelie seguía viendo a sus amigos-. les presento a mi hijo.

- Buenos noches, señores Dubois .-Amelie entrecerró los ojos tratando se adivinar de donde escuchó esa profunda voz.- Buenas noches, chérie.

El grupo de amigos estaban con los ojos abiertos, mirando en frente de Amelie, quien tardó en voltear a ver al dichoso hijo.

Al voltear por completo sintió como su alma dejaba su cuerpo.

Vio como el chico enfrente suyo agarró delicadamente su mano y besó sus nudillos, manteniendo su mirada fija con Amelie, para después sonreír.

- ¿Jungkook? .-murmuró Amelie atónita, haciendo que sus padres abran los ojos exageradamente.

Jeon Jungkook, el hijo de los jardineros de su casa, estaba frente a ellos.

Ninguno de los 3 se lo esperaba.

Una suave melodía empezó a sonar. 

[La canción en español no está en spotify]

- ¿Me permite este baile, chérie? .-preguntó Jungkook estirando su mano hacía Amelie.

- Claro.- agarró la mano de Jungkook sin importarle lo que diría su madre.

Ambos caminaron al medio de la pista de baile, Jungkook colocó una mano en la cintura de la menor y otra agarró su mano, mientras la menor colocó una mano en el hombro de Jungkook y se empezaron a mover al compás de la melodía.

- Ese vestido te queda increible .- halagó Jungkook.

- Gracias, aunque el que lo compró se debe llevar el credito.

Jungkook rió. El vestido era el regalo que le había dado a los 17 años.

Jungkook miró los ojos de Amelie, quienes derrochaban una pizca de confusión.- Me imagino que tienes miles de preguntas-. le dijo antes de darle una vuelta.

- Imaginas bien, pero eso será despues, quiero disfrutar este momento contigo.

Ambos se quedaron en silencio.

- ¿Sabes algo? 

- Dime.

- Yo compuse esa canción -. dijo Jungkook agarrando con firmeza la cintura de su amada.

- ¿Enserio?

- Lo compuse el día que te fuiste, chérie. Tuve que rogarle al señor para que lo cante.

Se quedaron en silencio.

- La vida va, los sueños morirán .-comenzó a cantar Jungkook-.  Al mío digo adiós y sin saber que aquí tu estabas, mi sueño te encontró .-acarició la mejilla de Amelie, quien lo veía con lagrimas en los ojos-.  Y hoy por siempre ya sé, que solo quiero tenerte aquí.

Jungkook colocó ambas manos en la cintura de Amelie, quien entrelazó sus brazos en la nuca de Jungkook y juntaron sus frentes cerrando sus ojos.

- Y este sueño también nos separó, tú allá y yo aquí .-cantó levemente Jungkook, dejando un casto beso en la frente de la castaña, quien sollozaba, para después recuperar su antigua posición y empezó a darle vueltas a Amelie, haciéndola reír levemente, y la cargó en sus brazos mirándola a los ojos.

- ¿Y como enfrentar la realidad?, si hoy te pierdo aquí .- susurró a Amelie, sabiendo que finalidad tenía este baile.

- No me vas a perder .-le dijo Jungkook antes de volver a bailar al compás de la canción.

Los invitados miraban maravillados la escena, la escena de dos corazones separados por años juntándose una vez más para no separarse nunca más.

Los esposos Dubois miraban la escena. El señor Enzo sonreía, sabía que su hija estaba en buenas manos. La señora Yena, tenía lagrimas en los ojos, sabía cuanto daño le había hecho a su hija durante años, privándola de amar al amor de su vida.

Y nuevamente, la luna fue testigo del reencuentro de los amantes.