Mi historia es muy sencilla.
Era un joven estudiante, con ambiciones y una novia maravillosa. Cierta noche la llevé a cenar, anillo en bolsillo para proponerle matrimonio, pero no pude. No me faltó valor. Fue culpa de siete cabrones. No se conformaron con quitarnos el dinero y los móviles, también la querían a ella. Cuatro de ellos me aguantaron mientras los otros tres despojaban a mi casi prometida de su ropa y tomaron deliberadamente algo que hasta entonces solo era mío. Se turnaban para profanarla y sugetarme. Aún veo sus ojos perdiendo brillo, su expresión de pánico, angustia, derrota y asco. Y yo no podía hacer nada más que lanzar puñetazos al aire y llorar de impotencia. Al saciarse me golpearon para evitar que los persiguiera. Pero nunca olvidaría sus caras, como no podría olvidar la expresión de mi chica ni la rabia hacia mí mismo. Ella no pudo vivir con tal recuerdo. Encontró consuelo entre la tranquilidad de su cama y un frasco de pastillas. Yo no podía. Ellos debían pagar. Los busqué. No daré detalles grotescos, pero cobré mi venganza uno a uno.
Me pudriré aquí en la cárcel, pero sepan que no me arrepiento de nada.
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No me dejes sola
Short StoryColección de microcuentos varios de ImberBles🍁 Próximamente en físico