Mar
De camino a la universidad no podía dejar de pensar en Eric, y no solo por lo que había pasado hace unos minutos.
Hace poco más de un año me mudé aquí, a Barcelona. Estoy viviendo junto a mi mejor amiga en un pequeño piso muy cerca del estadio del club de futbol de esta ciudad, mundialmente conocido. He ido a ver muchos partidos, y hasta soy socia del club. Soy una culé en toda regla, y lo que menos me esperaba es que pasase algo asi.
Esto me ha recordado a mi intento fallido de puesto de trabajo en el FCBarcelona... Lo cierto es que cuando mi mejor amiga y yo llegamos aquí lo primero que hicimos fue buscar un trabajo. Mi mejor amiga, Alexia, lo encontró a unos pocos días de llegar, ella está estudiando audiovisuales y por la baja de un cámara en el telediario de una cadena de televisión la llamaron para cubrirlo, ya que ella tenía experiencia con las cámaras, webs, y programas de edición. Resumidamente, ella se dedica a grabar por Barcelona junto a una presentadora las noticias de la ciudad para luego emitirlas en televisión. La verdad es que ahora mismo la única que trabaja es ella, y nos mantenemos gracias a ella. Yo he tenido trabajos temporales como camarera, asistenta en tiendas de ropa... Pero como ya he dicho, son todos temporales. Sin embargo, me sienta muy mal que Alexia tenga que pagarlo todo, asi que sigo aceptando este tipo de trabajos mientras estudio, y ya le dije a ella que todo lo que gastemos con su dinero se lo devolvería tarde o temprano.
Lo cierto, es que antes de incluso llegar al piso donde ahora vivimos, presenté una solicitud de trabajo en la Ciudad Deportiva Joan Gamper, más conocido como las instalaciones donde trabaja y entrena el FCBarcelona. El trabajo de mis sueños es trabajar en el equipo médico del club, pero en un sitio así solo trabajan personas con muchos estudios y totalmente cualificadas, y la muy ingenua de mi estaba convencida de que podrían hacer una excepción con una chica de 18 que acababa de llegar a la ciudad y no tenía todavía la carrera. Y adivinad qué. Llevo llamando y enviando por correo mi solicitud todos los meses desde que llegamos aquí, y aún no me han llamado, ni creo que lo hagan.
Pero siempre intento mirar las cosas por el lado positivo y puede que haya un mínimo de probabilidades de que me den trabajo allí, si sigo insistiendo. Como la gente dice: 1% de probabilidad 99% de fe.
Aunque... Respecto a lo que ha pasado hoy, imaginemos el caso de que hoy me llaman y me dicen que podría ir de prácticas y que verían la posibilidad de contratarme más adelante dependiendo de cómo trabaje en el club o algo por el estilo. Tendría que trabajar con los jugadores... ¿Se acordaría Eric de mí? Seguro que no. Me estoy creando muchas paranoias.
Cuando menos me di cuenta llegué a la universidad, quité todos mis pensamientos que tuviesen que ver con Eric y me concentré para el examen.
Eric
Llegué al vestuario corriendo y me cambié lo más rápido que pude, estaba poniéndome las botas cuando entra Pedri al vestuario.
-¡Eric! –viene y me abraza-
-Hola, tío. –le digo mientras le doy una palmada en la espalda y me vuelvo a sentar para terminar de ponerme las botas-
-Oye, ¿y eso que llegas tarde? –dice Pedir cogiendo su botella de agua-
-Milka, ha esparcido todo el saco de pienso por todo el salón, y tenía que recogerlo antes de venir. Y a parte, se me ha ocurrido la maravillosa idea de venir andando.
-Hermano, ya sé que llevas casi 2 meses sin poder andar bien, pero te acabas de recuperar. Menudas ganas tienes tú ya de empezar. –dice y nos reímos-
-¿Crees que Xavi se enfadará? –le digo ya saliendo junto a él al campo donde entrenamos-
-Qué va. Nunca has llegado tarde, seguro que te lo perdona. –dice poniéndome una mano en el hombro-
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¿Cuántas posibilidades habrían?
Romance"Siempre hay alguien que estará para apoyarte. Y si no lo crees, aquí estoy yo."