𝐄𝐄𝐈: Luego de escapar de su casa, una joven pelinegra se decide postularse en la legión de reconocimiento, quién allí conocerá el amor y la cruel verdad que esconde su familia.
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─ Levi x oc
─ Manganime Shingeki no ky...
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Declaración.
Hace 4 años atrás.
Toda la legión estaba en un barco vistiendo de forma formal, los chicos llevaban gorros que hacían fuego a sus trajes. El barco tomaba rumbo hacía Marley, en donde se encontraba la mansión Azumabito.
─ Era verdad que había ciudades y gente afuera de las murallas.
─ No digas lo de "Fuera de las murallas" delante de otros. ─ Espeto Jean.
─ Sí, si.. lo sé.
─ Es el continente del exterior. Seremos los primeros de dentro de la murallas en pisarlo. ─ Habló con seriedad Sasha.
─ ¡Que no lo digas en voz alta!
Grito Jean.
A pocos metros estaba Hange, Levi y Mika, quién vestía de un smokin blanquecino con un sombrero del mismo color y un lazo del contrario. La pelinegra miraba hacía dónde provenía los gritos de Jean para girar su vista hacía su mejor amiga.
─ Esto puede considerarse parte de nuestro trabajo. Que empiece el reconocimiento.
Una bocina sonó en todo el barco avisando que habían llegado a su destino. La legión al bajar del barco se quedaron reunidos viendo las maravillas y nuevas creaciones que en las murallas no había.
─ Bienvenidos al continente de Marley. ─ Saludo Onyankopon. ─ Los llevaré hasta la mansión Azumabito.
─ ¡Onyankopon! ─ Dijeron felices al unisonio Hange y Mika. La pelinegra se acerco hacía el hombre dándole un cálido abrazo, pues se encontraba contenta por poder llegar hasta este punto y conocer nuevas cosas, al lado de su amado y sus seres queridos.
─ Este es el mayor puerto de Marley y.. ─ Atrás de Onyankopon quién era observado seriamente por el de baja estatura, pasó una auto quién producia un sonido peculiar el cual llamó la atención de los visitantes.
─ Ese caballo.. ¿Es un caballo?
─ Es un toro. ¡Tiene que ser un toro!
─ Es un auto.. ─ Habló Hange con una sonrisa emocionante. ─ Nos hablaron de ello antes de llegar. ¡Eh, auto!
─ ¿Eh, nos estan mirando? ─ Dijo Armin.
─ De seguro creen que somos del campo. ─ Jean bajó su sombrero ocultando su pena. ─ Fingire no conocerlos.
─ Si no los detienes, intentaran darle zanahorias a ese trozo de metal. ─ Dijo Levi conociendo a su equipo.