No dejes que te descubran Precuela

tarde de té

En el desayuno avisas que saldrás por la tarde, sin entregar mayor detalles, ella te da permiso para salir a regañadientes, no tiene motivos para oponerse a tu salida, Salvo que debes llegar antes del aterdecer.

Agradeces la disposición de tu madre para dejarte salir, sin mayor problemas, regresas a tu habitación buscas una Yukata más apropiada para la tarde.

Mientras tanto Senjuro le pregunta a su hermano si le aviso a su padre de que tendrían visitas.

Kyojuro suspiro, si le informé, solo dijo que hago perder el tiempo de la gente, pero no te preocupes por la opinión de él.

Procuremos tener una tarde agradable, Senjuro.

Claro, dice el pequeño, iré a terminar de preparar los dulces, haré onigiris también, hermano?

Um, asiente con la cabeza Kyojuro.

El pequeño sonríe y se dirige a la cocina.

.....

Por la tarde terminas de alistarte pero no quieres ir con las manos vacías por lo que buscas dentro de la alacena que tienen designada para regalos, una caja de té especial.

Avisas que vas de salida a la señora Yamada, dirigiéndote hacia la casa de la familia Rengoku.

Está vez no había nadie fuera del portón por lo que decides asomarte para ver si había alguien en el patio.

Kyojuro te divisa y va a tu encuentro.

Buenas tardes TN San, gracias por venir.

Lo saludas de vuelta, y le entregas el regalo.

Muchas gracias, dice Kyojuro, le diré a Senjuro que lo prepare más tarde.

Sígueme, no pretendo tenerte de pie toda la tarde en medio del patio, ríe Kyojuro.

Tu sonríes, y lo sigues, te guía al interior de la casa, a un salón que usan para merendar con vista al patio.

Puedes ponerte cómoda TN San, cometa Kyojuro.

Muchas gracias, respondes.

Al poco rato aparece Senjuro con unos dulces para ofrecer.

Buenas tardes Señorita, dice animadamente.

Lo saludas de vuelta.

En un breve momento los invadió un silencio, cómodo

Senjuro decide iniciar la conversación ya que al parecer ninguno de los dos sabía por dónde empezar a conversar.

Yoshida San, como conoció a mi hermano, pregunta, mientras saca un dango.

Mmm... Podría decir que lo conocí mientras alimentaba escondidas a un gato, muy temprano por la mañana.

En serio, señorita, dice el pequeño.

Así es, dice Kyojuro, aunque yo la conocí antes producto del ataque de un deminio, pero estaba inconsciente, por lo que el encuentro de esa mañana sería nuestro primer encuentro. Sonríe.

Ohh, ya veo, entonces ella está sabe lo que haces hermano.

Um, dice él, hablamos de eso hoy en la mañana.