bad boy ; yeongyu

Capítulo 2.

Beomgyu reparó en el piercing que tenía en el labio inferior aquel chico y de cierta manera se perdió en la forma de sus labios, pero sobre todo en su mirada tan particular y de cierta manera ¿coqueta?, hasta que su amigo Taehyun le habló de nuevo para poder salvarlo de pasar alguna vergüenza, o más bien, salir del closet ahí mismo. 

Es decir, ¿acaso Beomgyu había mirado antes a un hombre así? No recordaba haberlo hecho antes, pero es que este chico estaba cautivándolo simplemente, es decir, claro que estaba enojado porque él era la persona que le había estado robando a sus conquistas en un abrir y cerrar de ojos, pero también se sentía emocionado porque aquel desconocido del que sólo sabía su nombre y la forma de su bonita boca le estaba haciendo sentir nervioso como en años no lo hacía más que un examen de literatura. 

— Bueno, tenemos una clase importante por acá así que nos vemos luego, un gusto conocerte, Yeonjun — su amigo Taehyun sí que lo había salvado de algo grande, como siempre últimamente. 

— Oye, Beomgyu, ¿qué te pasa? Casi te abalanzabas a comerle la cara y no a darle un gran puñetazo en la cara como me habías dicho hace treinta minutos — Beomgyu por fin pudo reaccionar del shock que le había dado hace cinco minutos, pero la imagen de la manera en que Yeonjun movió su lengua para humedecer sus labios seguía reproduciéndose en una especie de bucle. 

— Nada... ¿yo? No, yo no estaba haciendo eso, ¿me estás intentando decir que me gustan los hombres? ¿a mí, el mujeriego más popular de la escuela? — la cara que había puesto Taehyun tras las palabras de su amigo era insólita, estaba entre confundido y con ganas de reírse hasta que le doliera el estómago. 

— En primer lugar, podrías ser bisexual ¿sabes? No sólo existen los gays y por otro lado, sí lo estabas haciendo, si hubiera podido tomar una foto, es decir, la tensión se sintió demasiado fuerte, hubieras mirado la cara de Soobin, estaba perplejo y Yeonjun, mira, ese chico te estaba coqueteando a más no poder, tal vez sea algún tipo de sex symbol o cómo les llamen ahora a esas personas muy atractivas que cautivan a quien sea — Taehyun se quedó pensando mientras Beomgyu acomodaba su mochila en sus hombros y tomaba de una mejor manera su guitarra, que sin saber cómo, había podido sostener después de sentir que este chico casi hacía que sus piernas temblaran además de su corazón. 

— No digas tonterías, Taehyun, fue una mirada de odio la que le di y vi su piercing nada más porque me pareció genial, nunca había visto uno a vivo color y me impresionó que se le viera bien, del puñetazo me encargaré después.

Aunque en realidad, Beomgyu no quería más que descubrir qué sabor tenían los labios de aquel chico. 

[...]

Yeonjun había soltado una risa divertida después de que Beomgyu se fuera rápidamente acompañado de su amigo Taehyun, Soobin lo miró de cierta forma desconcertado, porque claro, sabía que el chico era coqueto de cierta forma pero creía que éste ya estaba acostumbrado a las miradas de personas sobre él y la forma tan particular de demostrar que querían besarlo. 

— Ese chico, Beomgyu, ¿es gay no? Porque amigo, me quería comer toda la cara — comenzó a reírse con fuerza. 

— Pues nunca ha dicho nada de eso, es decir, hay rumores pero de verdad todas sus parejas han sido mujeres, entonces no lo sé, capaz lo dejaste impactado porque te estás robando a sus conquistas — Soobin no terminaba de entender la sonrisa que había soltado Yeonjun. 

Yeonjun, por otro lado, se sentía triunfante, por fin había obtenido la atención de Beomgyu, se estaba robando sus conquistas a propósito y cuando conoció a Soobin y le enseñó una foto de Beomgyu fue a ponerse ese bonito piercing, lo cual había sido tres semanas atrás y además esperó a encontrárselo por fin, lo cual había sido el momento perfecto o así lo pensaba él, porque vaya que iba a seguir luchando por la atención del más bajito. 

— Como sea, se ve que es muy competitivo ¿eh? estoy seguro que me quería dar un golpe por lo que hice, pero no es culpa mía, soy irresistible ciertamente — la mirada de Yeonjun seguía en aquel pasillo por el que había partido Beomgyu hace diez minutos. 

Soobin rodó los ojos y además comenzó a reírse. 

— Pues sí, es decir, antes de que nos hiciéramos buenos amigos, ya habíamos peleado un par de veces hasta que nos dimos cuenta de que era algo estúpido y así hicimos un grupo para no "robarnos" conquistas entre nosotros, pero tal parece que acabas de comenzar la guerra nuevamente y debo decírtelo, Beomgyu es una persona muy intensa que se engancha con facilidad, si lo haces enojar no te dejará en paz en mucho tiempo. 

"Perfecto." Pensó Yeonjun, era justo lo que había estado buscando desde hace muchísimo tiempo.

[...]

Mientras Beomgyu caminaba con Taehyun a su lado, recordó las palabras y al chico que su amigo le enseñó una hora atrás, por lo que se propuso a sacarle más información a éste. 

— Entonces, te gusta un chico — Taehyun volvió a sonrojarse — que conociste en la biblioteca... — parecía que Beomgyu tenía la intención de burlarse pero al mismo tiempo estaba procesando el asunto — ¿le vas a hablar?

— No, nunca, es decir, ¿no has visto cómo siempre cuando intento hablar con un chico termino humillándome solamente? — a veces olvidaba que su amigo era demasiado tímido para iniciar una conversación sin que los nervios le ganaran y terminara diciendo todo lo contrario a lo que quería decir. 

— ¿Por qué no? Vi al chico dos segundos y puedo decir que se ve realmente simpático, no creo que pasen cosas feas, además, básicamente ya le hablaste y no te pasó nada ¿no? — si hablaba por él, Beomgyu tenía ganas a veces de ser una clase de Cupido para su amigo, así que estaba emocionado si pasaba algo entre el chico de la biblioteca y Taehyun.

— Beomgyu, no insistas por favor, no va a pasar nada, así como tú negaste cosas yo me negaré a participar de otra humillación a mi persona así que no, gracias. 

Aunque no pudo convencer a Taehyun, Beomgyu sabía que su amigo que ya iba todos los días a la biblioteca, iría ahora con emoción esperando a encontrarse con aquel chico, es decir, se conocían desde que iban ambos a secundaria, ya iban en el último año del bachillerato, había estado en la primer relación y ruptura de éste y viceversa. 

Taehyun le sonrió de manera tímida y siguió caminando por el gran pasillo que los dirigía al salón donde normalmente hacían sus tareas, o al menos eso hacía Taehyun mientras Beomgyu se ponía a enviar mensajes por su celular tratando de ligar, lo cual, parecía que ahora estaba demasiado distraído pensando en un chico como para ponerse a hacerlo cuando se sentaron en las sillas cerca de una mesa rodeada de gente con la cabeza metida entre los libros. 

El más bajito, por supuesto, Taehyun comenzó a hacer sus tareas y él comenzó a divagar en sus pensamientos como solía hacerlo normalmente al acompañar a su amigo a aquel salón. 

Definitivamente el chico de los piercings había dejado una impresión que no olvidaría por varios días, aunque él no quisiera admitirlo en voz alta.