Capítulo 9

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Lisa se aclaró la garganta y finalmente levantó la cabeza para mirar a la mujer sentada frente a ella.

Jennie mantuvo los ojos en la mesa.

"Así que... tienes buen aspecto. Quiero decir... te ves bien". Espero que no haya malinterpretado eso aunque se ve bien incluso con sólo un par de jeans y un suéter.

Las palmas de sus manos estaban sudando un poco. Se las limpió con las servilletas de papel.

"Gracias". Jennie intentó mirar a Lisa y sonrió, pero vaciló. Sorbió su café. "¿Qué tal las vacaciones?"

"Bien. Divertidas". Lisa respiró profundamente. "Mira, sobre ese dí..."

"Lo siento", soltó Jennie. Sus mejillas se estaban poniendo rosadas. "Fue culpa mía. Siento haber arruinado tu carrera".

"No arruinaste mi carrera".

"Lo habría hecho".

"Pero no lo hiciste", dijo Lisa con firmeza. "Así que dejémoslo así. Además, también fue culpa mía. Podría haberme negado".

"Estabas borracha".

"Un poco mareada quizá, pero definitivamente no borracha. No habría recordado nada si lo estuviera".

"Eso no justifica lo que hice. Lo siento", dijo sinceramente, mirando a los ojos de Lisa.

"No pasa nada". Lisa sonrió. "Como dijo Yeri, todos cometemos errores. Yo he pagado por los míos. Dejemos eso atrás".

Jennie asintió lentamente. "De acuerdo". Empezó a juguetear con la cuchara de su plato.

"Jisoo me dijo que habías seguido mi consejo sobre el fondo fiduciario". Jennie volvió a mirar a Lisa y sonrió.

"Sí, lo hice".

"¿Cuánto aportaste?".

"Dos tercios".

"¿Y el otro tercio?" Lisa ya sabía la respuesta. Sólo quería oírla directamente de Jennie.

"Lo doné como dije que lo haría".

"¿A?"

Jennie se movió en su asiento. "A algún orfanato en alguna parte". Volvió a dar un sorbo a su bebida.

"Jennie..."

Jennie se sorprendió gratamente por el uso de su nombre de pila. "Me alegro de que dejes de lado el 'señorita Kim'".

Lisa se encogió de hombros. "Ya no soy tu abogada". Sostuvo la mirada de Jennie. "¿Qué orfanato?"

Jennie respiró profundamente. "¿Quién te lo ha dicho? ¿Yeri?"

"No. La señora Baek lo hizo. Todavía voy allí de visita al menos una vez al año".

"O-oh". Jennie desvió la mirada.

"¿Yeri te lo contó?"

"No te enfades con ella, por favor. Yo la obligué a decírmelo. Fue mi culpa". Tragó saliva.

"Otra vez". Jennie respiró profundamente. "Todo es culpa mía". Tal vez tenga razón. Parece que siempre arruino las cosas. Debería volver a ser una marginada social. Al menos todos tendríamos paz de esa manera.

Lisa no respondió a esto último. "Esa noche dijiste que necesitabas saber algo". Buscó los ojos de Jennie. "¿Qué era?"

Jennie no pudo responder.

"¿Era lo mismo que te hacía sentir curiosidad por mí y por mi pasado?"

Jennie asintió.

"¿Lo has descubierto?"

El peso de la pruebaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora