Capítulo 5: Cada vez es peor.

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- No me tienes que decir así, esta bien con un Stefan, hermosa.- le respondí.
- ¿Ella era tu novia?
- No -respondí con cierta mentira, pero, el que me acueste con ella no quiere decir que seamos novios, ¿O no es eso lo que dice un adolescente normal?- perdón por eso
- Tranquilo, esta bien ¿Cómo se llama tu novia? - dijo con cierto sarcasmo y de forma como si no me creyera.
- Ya te dije que no lo es.- dije con algo de risa, risa tímida.
- Bebé, cuelga y sigamos en lo que íbamos -se escuchó un gemido, me tomo un tiempo para saber quien era y me doy cuenta que es Marian ¿No puede ser? ¿Qué le pasa? ¿Cómo es que se mete en la llamada? Cierto... Bruja. colgué de la pena y me entró al momento una llamada de un número desconocido.
- Stef, bebe, al fin colgaste.- Si, era Mariand.
- No me digas bebe, ¿Qué te pasa? ¿Por qué te metes en mi vida personal? ¡Mis derechos!
- Trátame con amor, el trato - dijo
- Nada de amor ni que nada, no te metas en mi vida entiéndelo, déjame en paz, no jodas más, es solo y únicamente MI puta vida.- le dije casi gritándola especialmente la palabra MI y colgué la llamada.

..................

Era la mañana de un lindo domingo, mi tía me sorprendió llevándome el desayuno a la cama, fue así como desde ese momento supe que algo malo estaba pasando.

- Stefan, buenos días, ¿Cómo amaneces?
- Bien, gracias, que sorpresa, a que se debe tanto - realmente ¡QUÉ SORPRESA! Sé que sonó algo malo el decir que a que se debía pero tenía que hacerlo.
- Escucha, iré al grano.
- Lo sabía, ¿Que sucede, tía?
- Stefan, sé que en tu vida has perdido a muchas gente y que puede...
- Tía, dijiste que al grano y quiero realmente que lo hagas.
- Es duro para mí...
- Al grano, dije.
- Ayer fui al médico y me diagnosticaron Cancer pancreático, me dijeron que me queda por mucho 1 mes de vida, puede ser mañana o de hecho exactamente en una mes.
- Tía, no- dije y empecé a llorar- no puedes, simplemente no, por favor, no me dejes
- Me encantaría hacerlo- y se le empezaron a escurrir las lagrimas, allí detallándola me di cuenta de cuan hermosa era y de cómo siempre había estado ahí, para mí, pero nunca me daba cuenta- pero es algo que se sale de mis manos, perdón, perdón por no darte todo lo que merecías, perdón por no darte todo lo que necesitabas, todo lo que querías, perdón, perdón por no ser quien debías tener de apoyo, quien debía cuidarte desde que ya sabes, lo que sucedió con tus padres, perdón por siempre llegar con distintos hombres, perdón, pero en serio te amo mi nene, eres como mi hijo.

Entendí entonces que no debía hacerla sentir peor, era algo que se escapaba de las manos de cualquiera, la quería y por eso mismo debía hacer que se sintiera mejor.

- Sabes, no más, nada de lagrimas -sequé mis lágrimas y las de ella y sonreí, ella sonrió después- cuando murieron mis padres, lo que mas me dolió fue el sentir que no había vivido suficiente con ellos, así que no dejaré que me pase lo mismo contigo, salgamos, vamos a divertirnos, ve a arreglarte que de resto yo me encargaré de que sea el mejor día que una persona puede tener antes de morir por un Cancer pancreático diagnosticado con 1 mes de vida.

Se fue, dejé el desayuno a un lado, me aliste rápido, sentía tristeza pero a la vez sentía que debía ser feliz y lo segundo era lo más importante.

- Vamos -grite mientras abría la puerta de la casa, mi tía bajo, hermosa y sutil, la quería tanto y aun no podía superar que se fuera a morir, es decir, no.

Fuimos al centro comercial, compramos mucha ropa en el Forever 21 y Pull&Bear, después fuimos a Mc Donald's y seguidamente al Starbucks donde pedí un frapuccino de caramelo, mi bebida favorita de todo el mundo, hablamos y siempre estuve con la idea de no recordarle aquello de su Cancer, ya sabes, no puedes pasar el mejor día que tu tía casi mama puede tener antes de morir por un Cancer pancreático diagnosticado con 1 mes de vida.

Fuimos a casa a eso de las 17:30 horas y llego el momento de la charla, me explico mas a fondo su enfermedad, estando los dos muchos más calmados y serenos.

- Como te dije me queda, au -gimió y se empezó a tocar arriba del abdomen, en su páncreas- Stefan ayuda, pásame las pastas que están en la mesita de noche de mi habitación -iba a salir corriendo cuando me detuve porque ella me dijo que esperará- Stefan, perdón, te amo, nunca lo olvides

Ahí si fui corriendo y me demoré porque no encontraba ninguna clase de pastas o medicamentos, al fin logré encontrarlas y baje rápido, cuando baje vi en el piso a mi tia, con los ojos cerrados, supe que ya no había nada que hacer, era mi culpa, mi PUTA culpa, me demoré mucho en bajar su medicamento, si no me hubiera demorado tal vez se habría salvado, todo era mi culpa. Me puse de rodillas y empecé a llorar encima de su pecho. Me quedé dormido allí

..................

Mire el reloj y eran las 3:15 de la mañana, salí corriendo a la habitación de mi tía y me dirigí hacia donde sabia que guardaba la pistola mi tía para uso cuando uno de los manes con quien se acostaba se quería pasar de malo. La cogí y después fui a mi habitación, allí vi a Mariand dormida en mi habitación desnuda y que de repente salía de el baño Ángel, con una toalla que iniciaba en el puro pezón y llegaba hasta su parte intima, algo mas abajo, dio una vuelta al salir del baño y vi su trasero, recordé a lo que iba así que apunte el arma a mi cabeza y cuando justo iba a dispararme escuche abrir la puerta de mi habitación, era mi tía.

- No Stefan, por mi, por favor, escucha, esto no fue tu culpa, fue la mía, fue por no cuidarme y no solo en relaciones sexuales si no de por si en mi vida diaria.
- No me importa lo que digas, yo sé que fue por mi, debí dejar de ser tan estúpido y llevarte rápido la medicina.
- No Stefan, créeme, confía en mi, te quiero perdón, por mi, por tus padres por favor no lo hagas, escucha, debo decir algo, pero primero necesito que te calmes, mi bebé.- solté el arma, la cual calló en el piso y me recosté frente a una pared y empecé a llorar, a llorar mucho.- necesito que vallas a mi habitación ahí encontraras una carta, diciendo como te heredo todo, siempre te amaré, sin fin. Necesito que sepas algo, siempre que sientas el sol quemar tu piel, quiero que sepas que seré yo, que estaré contigo. Te amo Stefan.

Y desperté, en la camilla de un hospital, estaba una chica encima de mí, era Mariand, la estaba abrazando, ¿Qué me había pasado? ¿Por qué estoy aquí? Y ¿Ese sueño qué? Sin querer me moví un poco y ella despertó.

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