Revenge Night

Capítulo 11

Hay una sensación que a veces presentimos, sentir que algo o alguien esta detrás de nosotros, y ese sentimiento o nos hace correr o nos hace voltear por instinto. Ésta vez pase lo que pase, oiga o sienta, no puedo voltear hacia atrás en ningún momento

-¡¡Clover!!- oigo a Harper sin dejar de tocar la puerta

-¡Calma, necesito que se alejen de la puerta, se lo que debo hacer!-grito y vuelvo a mirar hacia la vela, dándole la espalda a la entrada

Tomo el papel y siguiendo las instrucciones del libro comienzo a escribir

Demonio, demonio, demonio, mírame. Demonio, demonio, demonio, mírame.

Arrugo el papel y lo lanzo hacia atrás sobre mi hombro y espero, no puedo girar, no puedo correr, no puedo cerrar los ojos. Mi corazón está acelerado y puedo oírlo latiendo en mis oídos. Permanezco inmóvil por unos segundos a la expectativa hasta que un lamento se hace presente. Me estremezco y siento pasos a mi espalda y sollozos, pero me mantengo mirando la llama de las velas. La sensación de miedo invade mi cuerpo de tal forma que mi primer impulso es salir corriendo cuando unas uñas se deslizan por mi espalda. Apreto los labios para ahogar un grito, e intento dejar mi mente en blanco. Hay risas y lamentos, y en mi oído susurran mi nombre, golpes, gritos y cada vez más mi cuerpo se alerta

Nunca se mostraran ante tus ojos

Eso era algo que me calmaba, saber que no iban a aparecer de frente, ¿pero, si podían tocarme, no podían herirme también?

-¡Clover... Ya puedes voltear, la puerta se ha abierto!

¿Harper?. Su voz sonaba cerca, ¿habia acabado ya?
Ladeo un poco mi cabeza pero mi atención se centra en las velas y recuerdo, después de morir Melannie las velas se habían apagado, anunciando el fin del juego, tal y como habían vuelto a encenderse la fogata en juegos anteriores… todo vuelve a la noralidad

No caigas en engaños, tienes que seguir en tu lugar con los ojos abiertos mirando al frente. Es un engaño. Un grito ensordecedor resuena en mi oído y mis ojos se entrecierran intentando soportar aquello sin cerrarlos del todo. Los ruidos, gritos, sollozos y gruñidos se hacían más intensos conforme pasaban los minutos. Oigo al fondo la voz de Noah y de Harper

-¡No lo hagas Harper!

-¡Va a morir!

-Eso no va ha evitarlo

¿Aquello era real? Ya no podía diferenciar entre la realidad y el juego. Después de unos minutos noto que el silencio en la habitación se alarga. .. me había concentrado tanto en las voces de fondo que había ignorado lo demás, me asombro al ver que finalmente las velas se habían apagado y suspiro, me pongo de pie con cautela y siento todo mi cuerpo de gelatina, el miedo seguia latente en cada rincón de mi cuerpo. Escucho un sonido y me quedo estática, un chirrido de puerta y al girar compruebo que en efecto se había abierto. Lo logre. Sin embargo no era todo

-¡Cloveeer!

Golpes de puerta y gritos espantosos resonaban. Corro fuera del cuarto y veo a Harper frente la ouija en un aspecto extraño, susurraba cosas que no lograba oir y su cuerpo se retorcia en el suelo

-¿¡Qué le ha pasado!?

-Intento jugar sola, la ouija la rebotó y ahora está ida, no logro controlarla

La cabeza de Harper da la vuelta completa al verme y veo con pánico como con sus pies y manos comienza a correr hacia mi en una posición antinatural mientras emite un grito desgarrador. Me hago a un lado cuando se acerca y siento que me empujan haciéndome caer al suelo.

Noah la había empujado dentro del baño y ahora sujetaba con fuerza la manija para impedir que salga. A tiempo las campanas del reloj anuncian la media noche, sin embargo mi cuerpo no parecía  reaccionar

-¡Huye, que esperas!- revisa su bolsillo y me lanza las llaves del coche de Mike

-¿Donde está Nathan?

-No lo sé, lo perdí de vista cuando...- un grito, se gira y sujeta con fuerza la puerta- ¡Clover marchate!

-¿Pero qué pasara con….?

-¡Vete de aqui!

Corro hacia la salida y abro la puerta con los ojos cerrados, al pisar afuera y abrir los ojos espero a que sea lo que sea me pase, pero nada sucede. Sigo viva. Comienzo a andar y me detengo a ver la lápida bajo el Sauce seco. Aquella debía ser la tumba de Liliam

《Estuvo toda la noche con el oso》

Había visto el ático y no había rastros de ese oso, y había estado con Harper en la habiatacion de Liliam y no estaba tampoco, mucho menos en el sotano ¿si el oso no estaba en ningún lugar… sería posible qué..?. corro de vuelta a dentro y escucho gruñir a Noah, debía estar agotado de sujetar la puerta

-¿¡Qué demonios haces aún aquí!?

-¡Necesito buscar una cosa!- miro a todos lados, no había nada que me sirviera en aquel lugar

-¿Qué haces? ¡debes irte!

Ignoro su orden y sigo buscando hasta que mis ojos se fijan en la cesta junto a la chimenea, una pala de metal con la que remueven las cenisas, no podía ser mejor. Tomo el objeto y antes de salir veo a Noah y cerca de la puerta el bate de mi disfraz y una idea surca por mi mente, descabellada, pero quizás funcione

-¡Noah, tengo un plan!

-¿Qué?

-Abre la puerta

-¿¡Te has vuelto loca!?

-Solo hazme caso, vas a retroceder lo suficiente para dejarla salir y acercarse a ti

-¿Que vas a hacer Clover?

-Confía

Lo veo dudar con la mirada en la manilla, los golpes en la puerta no habían cesado, sabía que no podría contenerla más tiempo. Asiente y aprieta la manilla con fuerza

-Muy bien, tú dices

Hago una pausa tomando mi lugar a un costado de la puerta. Apretó con fuerza el bate y me coloco en posición como lo haría un jugador de beisbol a punto de batear. Tomo una calada de aire y asiento

-Ahora

La puerta se abre y Noah comienza a retroceder, de la habitación comienza a salir mi prima y los pelos se me erizan al ver lo aterradora que se veía su postura, su pelo enmarañado cubriendo sus ojos y tenía aruños en sus brazos.

Sale mirando fijamente a Noah hasta que se percata de mi cercanía. Suelta un grito he intenta acercarse pero se lo impido, dando un batazo sobre su cabeza, lo suficientemente duro para dejarla en el suelo

-¿¡La mataste!?

Me inclino y siento el pulso en su cuello, eso me relaja

-No, esta inconsciente, pero no tardará en despertar… Harper sigue ahí, debe estar poseída por esa cosa- recupero el bate y se lo entrego a Noah- ésta vez tendrás que ponerlo en uso tú