Mae.La fiesta está divertida lo puedo notar en todas las personas que asistieron y en otro momento la hubiera disfrutado, pero estoy sola y no me gusta divertirme sola.
Llevo un tiempo aburrida de esto. No veo a mis amigas ni a mi novio. Decido ir a buscarlo por la casa de Drek.
Lo busco en el patio, la piscina, la cocina, en la sala, pero nada. No hay rastro de Bryce.
Veo a Drek platicando con algunos chicos que no conozco y me acerco a él para pregúntale si ha visto a Bryce.
—¡Drek! ¿has visto a Bryce?—pregunto gritando por la música tan alta.
—No, pensé que estaba contigo—niego con mi cabeza—Tal vez y este arriba. La última vez que lo vi estaba algo ebrio, debe estar durmiendo en algún cuarto, ya conoces su poco aguante al tomar alcohol.
—Iré a buscarlo. Gracias.
Camino hasta las escaleras, las subo manteniendo mi vista abajo, ya que hay muchas parejas fornicando.
Llego a la segunda planta y busco en cada habitación de la casa y nada de él. Decido buscarlo en el baño, tal vez y este ahí. Toco la puerta del baño, pero al ver que no contestan, abro la puerta y me llevo una grata sorpresa.
Bryce teniendo sexo con alguien más.
—Pero que mierda—me quedo en shock al ver está escena. Bryce empotrando a una chica que no logro ver su rostro.
—Amor...—gira su cabeza y me mira ahí parada. Su cara tiene una expresión de sorpresa.
Desgraciado.
Cínico.
Pito chico.
Wow, Mae cuando estás enojada eres muy sincera.
No le doy tiempo decir o ver con quien está cogiendo porque cierro la puerta rápidamente.
Tengo un jodido nudo en la garganta, las lágrimas están bajando por mis mejillas sin parar. Bajo las escaleras apresuradamente. Mi mente está en blanco. Bryce siéndome infiel. Es algo que no puedo creer.
El novio perfecto resultó ser un grandísimo idiota...
Salgo de casa de Drek y camino por toda la calle sin rumbo alguno.
En estos momentos estoy sintiendo enojo y tristeza, pero más enojo.
Estoy sola es el momento en el que necesito a mis amigas. Busco en mi pequeño bolso mi teléfono, marco el numero de Patrick, no quiero estar en este lugar sabiendo que en cualquier momento me encontraré con Bryce.
—¿Mae?—pregunta una voz familiar me giro y veo a Poppy ahí. Con su ya característica ropa negra—¿Te encuentras bien?
Niego.
Camino hasta ella y la abrazo. Sé que la conozco desde hace un par de días y no en las mejores situaciones. Lo sé. Sé que ni debería abrazarla, pero es algo que necesito con urgencia.
Ella se tensa cuando la abrazo, pero después se relaja y me devuelve el abrazo. Por muy extraño que parezca Poppy huele chocolate.
Y ahí estamos las dos abrazándonos en medio de la calle a la luz de las farolas de la calle.
—¿Qué sucedió?
—Bryce—separo mi cabeza de su pecho y la miro.
—Bryce ¿qué?—pregunta confundida.
—Él...me engaño—vuelvo a enterrar mi cara en su pecho. No dice nada solo se queda en silencio acariciando mi cabello.
—¿Quieres que te lleve a algún lado?—pregunta después de unos minutos.
—No quiero molestarte más de lo que ya lo he hecho, estaba a punto de llamar a mi chofer. Si quieres puedes regresar a la fiesta, ya estoy mejor. Gracias—respondo.
—Ni una mierda, te llevare a tu casa—contesta.
—Segura que no quieres regresar a la fiesta.
—¿Yo? ¿En una fiesta de deportistas idiotas? Jamás.
—¿Entonces que hacías por aquí?—pregunto extrañada.
—Mi mejor amigo vive en la casa de allá—señala una casa que está a dos casas de la de Drek—Vine a dejarlo una vez que se acabó el partido. Ven, mi auto esta por aquí—toma mi mano y me guía hasta a su auto
—¿Tienes licencia de conducir?—pregunto al ver su auto.
—No, pero tengo un permiso para hacerlo—seguimos caminando hasta su Mazda 3 color negro.
—¿En serio negro?
—¿Qué? El negro es el mejor color que puede existir, además en color negro no se le nota tanto lo sucio.
—Eso fue de muy fabulosa Poppy—ríe mientras niega.
***
—Mae, yo te dije que era un idiota—me dice mientras maneja por las calles de Beaufort.
—Lo sé, Poppy—me quedo en silencio por lo que resta del viaje hasta llegar a mi casa.
—Buenas noches—nos saluda Park el vigilante de la privada.
—Hola, Park. Soy Mae y ella es Poppy una amiga—le sonrío.
—Hola Poppy—la saluda—Mae pensé que vendrías en el auto de tu novio—mi sonrisa de borra cuando menciona a mi exnovio.
—No—contesta rápidamente Poppy antes de que yo tuviera el valor de hacerlo—Su novio no la pudo traer porque estaba muy ocupado siendo un idiota—Popy dibuja una sonrisa de inocencia al guardia.
—Está bien...—asiente Park—Mae, ¿traes tu gafete?—digo que si con la cabeza y se lo entrego, él lo escanea en su máquina y cuando termina me lo entrega—Adelante pueden pasar.
Poppy avanza y le señalo cual es mi casa. Detiene su auto en frente de mi casa.
—Gracias nuevamente por traerme.
—No hay de que.
—Nos vemos mañana—me despido de ella con un beso en la mejilla y salgo del auto.
Subo los pequeños escalones de mi casa. Saco de mi bolso mi llave la introduzco en la cerradura y abro la puerta. Me giro vuelvo a despedirme de Poppy con la mano y finalmente entro en mi casa, cierro la puerta y escucho al auto arrancar e irse.
Poppy se ha vuelto especial en tan poco tiempo.
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Te quiero a tí y eso es lo que importa. (En Proceso)
RomanceMae pensaba que no le gustaban las chicas hasta que conoció a "la fabulosa Poppy". Desde que Mae y Poppy chocaron aquel día, las dos piezas perdidas del rompecabezas aparecen y encajan a la perfección . Después de que Mae se enterarse que su novio l...