PODER O AMOR

CAPÍTULO 9

Yanil regresa al palacio junto a Beltrán caminando mientras cruzan algunas palabras, se notaba un poco la incomodidad debido a su poca relación, ambos eran un poco similares en el aspecto de que no sabían que decir en una conversación de uno a uno, en un grupo de cantidad razonable era un poco diferente la situación en vista de que el peso de la conversación no pesaba sobre ellos, en este caso actual ambos solo divagaron un poco en el diálogo. 

No sabía que era amiga de mi hermana – exclama un poco sorprendido el chico. 

Es un poco raro eso, tomando en cuenta de que jamás lo había visto en su casa – contesta la morena con un poco de empeño en comprender la situación. 

Estudié fuera de casa en un internado y solamente volví para tomarme un tiempo de descanso, luego empecé el curso para proteger a la Realeza, aunque mi objetivo es convertirme en el consejero del príncipe – explica con mucha animosidad el algo rígido y meticuloso Beltrán mirando el paisaje de flores a su alrededor.  

Por eso es tan cercano al príncipe Nicholas – la muchacha ve al chico asentir levemente de una manera muy elegante lo cual le parece un poco protocolista.

¿Cuál es su objetivo señorita Yanil? – cuestiona el chico rubio observando atentamente a la morena que estaba algo indecisa. 

No lo sé, servir en el palacio un tiempo y talvez retirarme en unos años para vivir con muchos gatos – Yanil alzó los hombros en señal de no estar convencida con su plan, aunque sentía que no era sensato hacer planes a futuro. 

Es un objetivo un poco ambiguo, aunque si usted es feliz no importa lo que opinen los demás – inquiere el rubio mirando a Yanil de un modo sereno.

Por cierto, ¿ya despertó el chico herido? – cuestiona la morena poniendo sus manos en sus caderas de forma sutil.

No ha despertado aún, pero el medico dice que está mejorando de forma muy satisfactoria – la morena suspira aliviada ante esta respuesta cuando ve que el chico se sienta en el césped cerca de un arroyo tomando un descanso de la caminata al palacio.

Yanil lo observa distraído mirar el recorriendo de agua, se acerca de manera sutil y se sienta a una distancia prudencial para admirar ese lugar con más enfoque, lo cual sorprende un poco a Beltrán que sale de su repentino ensueño para mirar a la chica.      

Si el césped hubiera estado mojado, su vestido estaría en problemas – la chica lo observa divertida ante esta afirmación, ya le había pasado antes y no le tomaba importancia especialmente en un clima caluroso. 

Si supiera que amo correr bajo la lluvia no diría lo mismo, yo vivo el momento sin pensar en las reglas o el protocolo – el joven rubio la mira sorprendido por decir estas palabras, ellos dos eran tan diferentes pero un poco similares en el modo de pensar. 

Hablando de reglas, me pregunto si mi hermana rebelde habrá vuelto a casa o escapó a la ciudad a causar problemas – pronuncia Beltrán con un poco de preocupación.   

Esme seguro volvió a casa, está cerca la hora del té y ella no se lo perdería por nada – comenta Yanil con mucho ánimo, gracias a su amiga esa hora era menos pesada. 

Si lo sé, ella es una persona demasiado comunicativa y jamás perdería un momento de saber alguna historia que llene su hambre de información – el rubio recordaba todos esos instantes donde su hermana estaba al tanto de algunas conversaciones en esta hora especial. 

Escuchan un carraspeo muy poco disimulado detrás de ellos, se levantan de forma defensiva para notar la presencia del príncipe Nicholas, Archie y Froilán detrás de ellos mirándolos de manera seria, lo que logra asustarlos un poco.